El constructor alemán ha fabricado durante el primer semestre del año tantos vehículos como en todo el año fiscal 2009-2010.
La recuperación de la demanda europea de remolques y semirremolques en 2010 permite a Schmitz Cargobull anular sus programas de jornada reducida e incluso llamar al trabajo a un segundo turno en alguna de sus fábricas. El constructor alemán fabricó en el primer semestre tantos vehículos como en el año fiscal 2009-2010
Ulrich Schümmer, presidente ejecutivo de Schmitz Cargobull, el mayor fabricante europeo de remolques y semirremolques, se congratuló de la recuperación de la demanda, tras ver como en el año fiscal 2009-2010 sufría uno de los peores golpes de su historia. Según la asociación alemana de la industria del automóvil (VDA), la producción mundial de vehículos industriales por parte de los constructores alemanes descendió en 2009 un 50,5 por ciento con respecto a 2008 y el número total de vehículos de más de 6 toneladas de peso con carga fabricados, incluyendo remolques y semirremolques, bajó un 58,8 por ciento (un 65,5 por ciento si sólo se considera la producción en Alemania).
Ciñéndonos a la demanda de remolques y semirremolques en Europa occidental, las cerca de 70.000 unidades matriculadas en 2009 suponían un descenso del 57,5 por ciento. Aún peor, Schümmer ponía especial énfasis en subrayar que las pérdidas netas de Schmitz Cargobull en el ejercicio fiscal 2009-2010 habían sido de 83,2 millones. Como consecuencia de ello, el volumen de negocios de Schmitz Cargobull se redujo en el pasado ejercicio fiscal a sólo 666,3 millones, frente a los 1.594,4 millones del ejercicio 2008-2009 (-58,2 por ciento), descenso que venía a sumarse al ya registrado frente a los 2.113,6 millones del año fiscal 2007-2008 (-24,6 por ciento).
Todas estas cifras refrendan los terribles efectos que la crisis económica y financiera han tenido sobre la industria fabricante de remolques y semirremolques. Afortunadamente, al menos en Alemania parecen haber emprendido definitivamente el camino de la recuperación y Schümmer, que se enorgulleció de que su compañía hubiera soportado tan terrible embestida con su propio capital y sin necesidad de créditos, cree que la ya evidente recuperación de la demanda puede llevar el volumen de negocios del ejercicio fiscal en curso a más de 1.100 millones de euros y los resultados netos podrían situarse al nivel del equilibrio.
Ya en el primer trimestre del año 2010, la producción de Schmitz Cargobull alcanzó 4.308 vehículos, un 31, 4 por ciento más que en el mismo trimestre del año previo y ahora, la previsión de unidades fabricadas durante el ejercicio en curso supera las 30.000 unidades, aún muy por debajo del máximo histórico de 66.692 vehículos producidos en el ejercicio 2007-2008, pero téngase en cuenta que las 12.818 unidades construidas en el año fiscal 2009-2010 representaban un descenso del 80,7 por ciento frente a aquel máximo histórico.