Los portavoces de las principales organizaciones del sector escriben su particular ‘carta a los Reyes Magos’, con el foco en la transición energética, ante la exigente ‘agenda verde’ de Bruselas, y la pendiente digitalización.
Transporte XXI ha realizado una encuesta a las principales organizaciones del sector para pulsar su opinión sobre cómo se presenta 2025 y conocer los principales retos encima de la mesa. Las respuestas presentan matices, en función de los intereses de las distintas patronales, pero hay dos grandes desafíos que se repiten: la descarbonización, ante la exigente ‘agenda verde’ de Bruselas, y la transformación digital, una asignatura pendiente. Además, los diferentes interlocutores también coinciden en la necesidad de ser “flexibles” para “adaptarse a los cambios del entorno, cada vez más rápidos e inesperados”.
> ¿Cómo se presenta 2025?
Ramón Valdivia / Astic
Si se cumplen las previsiones de diferentes organismos especializados, que sitúan el crecimiento de nuestro PIB en torno al 2,3 por ciento para 2025, podemos afirmar que nuestro sector también crecerá, aunque moderadamente. Todo ello, en un contexto de gran incertidumbre, generada, principalmente, por la volatilidad regulatoria, la ambigüedad jurídica, así como por el alza de los costes, sobre todo en lo relacionado con personal, vehículos, componentes y, cómo no, en el transporte internacional también peajes para camiones basados en emisiones de CO2. Un gravamen que ya está implantado en Alemania, República Checa, Austria y Hungría y que el 1 de enero de 2025 ha empezado a funcionar en Suecia, Dinamarca y Países Bajos.
En 2025 cabe esperar que continuemos asistiendo a movimientos corporativos relevantes en el campo de las fusiones y adquisiciones con empresas de transporte, tanto en el lado comprador como en el lado vendedor.
Jordi Espín / Transprime
El año 2025 se presenta como el punto de encrucijada de muchos temas en los que se deben tomar decisiones y soluciones a los retos que, desde Europa, hemos planteado al mundo: la sostenibilidad entendida más allá del control de emisiones, en dos nuevos pilares fundamentales, la resiliencia y la ética, que, mediante la Directiva del CS3D, impactará de lleno en la cadena de suministro con la publicación de las guías de esta nueva normativa europea.
Marcos Badenes / Aldefe
Como en años anteriores, la pauta general, el mercado de almacenamiento frigorífico público, que es el que representa Aldefe, mantiene una estabilidad al alza. Esto significa que no se esperan grandes incrementos ni de contratación ni de facturación ni de volúmenes manipulados de productos, pero sí, sin duda, esperamos incrementos en línea con el crecimiento general del consumo de productos congelados y refrigerados. La logística de frío siempre ha mantenido un crecimiento sostenido a lo largo de los ejercicios anuales.
Nuria Lacaci / ACE
2025 se perfila como un año de transición marcado por tres grandes pilares: sostenibilidad, digitalización e intermodalidad. El sector deberá continuar con su adaptación a las crecientes demandas en sostenibilidad ambiental, económica y social, impulsadas por las regulaciones y por las expectativas de clientes y consumidores.
La automatización de procesos y la digitalización seguirán siendo estratégicos y uno de sus principales catalizadores será la inteligencia artificial. Como consecuencia de ello, la ciberseguridad se posicionará como una prioridad absoluta.
Se prevé que el comercio electrónico mantenga su crecimiento para continuar siendo un motor de cambio en los modelos logísticos y en la elección del modo de transporte.
Pero cómo transcurra 2025 dependerá, sobre todo, de nuestra capacidad para adaptarnos rápidamente a un escenario en constante cambio.
>Juan Gatnau / Astrae
Un año más de inquietud y en un horizonte con muchas dudas en lo que respecta al mercado y la inversión nacional, no así como en el panorama internacional, que en los proyectos de materias primas, se presenta como continuista y pujante. En lo tocante al sector, Astrae vislumbra pequeños pasos de las diferentes Administraciones autonómicas, que inician suaves pasos de acercamiento a criterios de informes y otorgaciones comunes, meta perseguida por la asociación durante muchas décadas.
Juan Diego Pedrero / AEFP
Difícil y complicado por las obras e interrupciones de las líneas. En efecto, los cortes previstos en la Red Ferroviaria de Interés General no permiten ser optimistas y tendremos problemas de explotación aún más acusados que en 2024. No obstante, las empresas siguen haciendo sus deberes e intentan crecer, o al menos mantenerse, excepto Renfe Mercancías, que sigue cayendo.
Ramón García / CEL
El 2025 se anticipa como un año marcado por avances significativos en sostenibilidad, digitalización y tecnologías dentro de la cadena de suministro. La implementación de normativas ESG y la meta de reducir emisiones contaminantes en un 90 por ciento antes de 2050 impulsarán cambios estructurales. Por otro lado, la adopción de tecnologías como la inteligencia artificial (IA) y la digitalización documental avanzará, con soluciones como el eCMR y la logística circular ganando protagonismo. Sin embargo, los retos geopolíticos, los costes energéticos inestables y la ciberseguridad seguirán exigiendo estrategias resilientes y adaptativas.
Francisco Aranda / UNO
Para el año próximo, las previsiones apuntan a una reducción del crecimiento del PIB respecto a este año, en torno al 2,3 por ciento y una inflación del 2 por ciento. La creación de empleo se moderará y también se reducirá el superávit exterior.
Los riesgos endógenos provienen de la incertidumbre política y regulatoria, que está afectando a buena parte de los costes de las actividades empresariales, sobre todo, porque las medidas de política económica implican una mayor carga fiscal y laboral (subidas de impuestos y costes salariales, como cotizaciones sociales, jornada reducida o salario mínimo). Todas estas circunstancias reducen la renta disponible, lo cual tiene un impacto directo en el consumo.
Además, nos mantenemos en cuotas de ahorro muy elevadas debido a tres circunstancias. El clima de incertidumbre; a que el colectivo que ha experimentado mayor incremento de renta son los mayores de 65 años (que son los que más ahorran), y a que el incremento de afiliación se está produciendo en su mayoría en colectivos de inmigrantes, los cuales destinan gran parte de sus ingresos para enviar a sus familias que están en sus países de origen.
Respecto al exterior, preocupan mucho las políticas arancelarias de Trump porque, aunque tendrán un efecto menor en España que en Europa, hay sectores importantes donde el impacto puede ser mayor, como el agroalimentario, la maquinaria, la química y la automoción. Esto podría perjudicar las exportaciones españolas, ampliando el déficit comercial. También hay que destacar las tensiones geopolíticas en Oriente Medio y la continuidad de la guerra de Ucrania, que pueden afectar a la oferta y a los precios de varios inputs energéticos.
En cualquier caso, la logística y el transporte ha dado ya sobrados ejemplos de su enorme capacidad para hacer frente con éxito a disrupciones de todo tipo en la cadena de suministro gracias a la transformación tecnológica que inició en su momento. Seguiremos siendo uno de los sectores más punteros e innovadores de nuestra economía.
Ovidio de la Roza / CETM
Venimos de un año marcado por la incertidumbre y por la inacción del Gobierno, que no ha prestado la atención que merece un sector como el transporte de mercancías por carretera, pilar fundamental para nuestra economía. En consecuencia, 2025 se presenta como un año lleno de desafíos, en el que urge solucionar cuestiones que no han sido atendidas, o al menos no como merecen, como la escasez de conductores, las exigencias medioambientales, la Ley de la Cadena de Transporte o la falta de aparcamientos seguros.
La mejora de la competitividad de nuestras empresas es clave y para ello necesitamos un compromiso firme por parte del Gobierno y del resto de administraciones, y una colaboración sólida con el resto de los actores de la cadena de suministro.
J. Andrés Arribas / Faprove
Va a ser un año con una pléyade de obras, porque se van a incrementar las intervenciones en la RFIG. Todas estas infraestructuras, que seguirán con el cartel: “Perdonen las molestias”, deben sensibilizar a todos los actores implicados: Adif, empresas ferroviarias, operadores, cargadores, clientes, etc. a fin de que se estudien soluciones alternativas, para evitar mayores extracostes, minimizar los perjuicios de estos trabajos y atemperar las incertidumbres de las que vamos conociendo.
Fanny Torras / Consell d’Usuaris del Transport
El año 2025 se presenta con bastantes dudas y mucha incertidumbre en temas geopolíticos y macroeconómicos, que afectan a la evolución de los negocios internacionales, pero con más volumen en nacional para algunos sectores. Con la presión de costes al alza, que difícilmente el mercado asumirá, lo que obliga a trabajar con márgenes muy estrechos; disrupciones continuadas ante un mercado cada vez más exigente; infraestructura ferroviaria deficiente, tanto en el ámbito europeo como nacional; y dominio de las navieras en sus negocios verticales.
Enric Ticó / Feteia
2025 se presenta como un año de grandes incógnitas. Por una parte, todos estamos a la expectativa sobre las medidas arancelarias que pueda adoptar la nueva Administración estadounidense y el impacto de las mismas. También tenemos abierta la cuestión del Acuerdo Mercosur, que debe ratificarse. Seguiremos con los trabajos relativos a la aprobación definitiva del CAU. Estamos a la espera de la aprobación de la Ley de Movilidad Sostenible, la nueva Directiva del Handling, la Directiva de Transporte Combinado… En definitiva, viene un año muy intenso y con grandes dudas en lo económico, lo que se traduce en mucho trabajo para la Federación.
Juan José Gil / Fenadismer
Los datos resultantes del último Observatorio de costes, precios y actividad publicado por el Ministerio de Transportes, cuyos resultados fueron positivos para el sector del transporte por carretera, nos permite adivinar un año 2025 también positivo para el sector, apoyado en una contención de los costes que se lleva produciendo en el último año y un crecimiento continuado de los precios que perciben los transportistas a fin de reducir la horquilla en la relación costes-precios que se produjo en los años precedentes como consecuencia del contexto internacional. Asimismo, es positivo el crecimiento continuado en los dos últimos semestres de la actividad de las empresas transportistas, especialmente significativa en transporte nacional, no tanto en transporte internacional como consecuencia de la coyuntura económica que atraviesan las principales potencias europeas, Francia y Alemania, que a su vez son los principales destinatarios de las exportaciones españolas. Por ello, seguimos siendo optimistas en la evolución del sector para 2025 en el ámbito nacional gracias a las previsiones sobre crecimiento económico que nuestro país va a continuar teniendo y, sin embargo, el sector vive con incertidumbre la situación económica de estancamiento que se pronostica en la Unión Europea, en contraste con la situación de España, lo que podría incidir en él activamente en el desarrollo del transporte internacional que supone la actividad de un tercio de nuestras empresas transportistas.
Antonio Pérez Millán / UOTC
El año 2025 para el intermodal terrestre va a ser un año muy difícil, condicionado por todas las obras de infraestructura ferroviaria. Va a ser muy complicado. Aún no se sabe si habrá alguna ayuda real para compensar los perjuicios terribles que tendrán empresas ferroviarias, cargadores, forwarders, operadores logísticos y operadores ferroviarios.
Carmelo González / CNTC
La falta de repunte de la actividad comercial y, por lo tanto, el desequilibrio de flujos, la crisis en el sector del automóvil, los anuncios de ajustes de plantilla en otros muchos sectores no solo en Europa, los conflictos bélicos, los diferentes puntos de vista sobre la economía y la política de los distintos países… vislumbran un año con muchas incertidumbres y que, casi con total seguridad, no será tranquilo. Además, tenemos inquietudes propias como la posible armonización europea de la normativa de masas y dimensiones, el control de emisiones, la fiscalidad, etcétera, que incentivan lo comentado anteriormente.
José Luis Romero / Anesco
El tráfico de mercancías por los puertos españoles ha experimentado en 2024 un notable crecimiento debido fundamentalmente a cuestiones geopolíticas como la volatilidad en el mar Rojo y el consecuente desvío en algunas rutas marítimas. No obstante, y a pesar de estos buenos datos, empezamos 2025 con la misma preocupación con la que iniciamos el año 2024, a saber, las consecuencias que el régimen de comercio de derechos de emisión (ETS) tendrá en los tráficos portuarios.
Por este motivo, y apoyando la Declaración presentada por los gobiernos de España, Italia y Portugal en Bruselas, desde Anesco seguiremos insistiendo durante este año en que es primordial que la Comisión Europea cree un marco político y jurídico que evite algunos de los riesgos del ETS como la pérdida de competitividad de los puertos europeos; impactos en el empleo; reducción del negocio de transbordo; fugas de carbono o desvío de barcos a puertos no europeos.
Antonio Llobet / CGAA
El año 2025 se perfila como un período de cambios y adaptaciones significativas en el ámbito aduanero. En primer lugar, deberán ultimarse durante el año todos los procesos informáticos para implementar el CAU. En segundo lugar, las regulaciones medioambientales enfocadas en la reducción de la huella de carbono de las operaciones comerciales y en la promoción de prácticas sostenibles y se implementarán otras normativas como la desforestación que debería estar en marcha a finales de 2025. En tercer lugar, prevemos controles más estrictos para prevenir el contrabando, el tráfico de drogas y otros delitos. Para ello, se utilizarán tecnologías avanzadas de detección y análisis de riesgos con el sistema ICS2. También creemos que con los cambios geopolíticos se revisarán y ajustarán las políticas arancelarias para adaptarse a las nuevas realidades comerciales y geopolíticas.
Elena Seco / Anave
Este año comienza con la entrada en vigor del nuevo reglamento Fuel EU Marítimo, cuyo objetivo declarado es fomentar el uso de combustibles renovables por el transporte marítimo. Pero la realidad es que la oferta de estos combustibles es muy reducida y a un precio inasumible.
La seguridad cibernética es una preocupación que va en aumento en el sector, dada la dependencia de la infraestructura digital, que se aceleró durante la pandemia COVID-19. Además, continúan los conflictos geopolíticos que amenazan la protección de los buques y sus tripulaciones y que están incidiendo en las matrices de origen y destino.
Estos asuntos y la escasez de marinos formados y con experiencia serán con toda seguridad asuntos prioritarios para nuestras empresas.
José Antonio Sebastián / Corr. Atlántico
Sabiendo cómo se ha comportado el año 2024, que ha sido año récord para el Corredor Atlántico, ya no solamente de licitación o de adjudicación, sino también de ejecución, el año 2025 se presenta aún mejor. Se presenta aún mejor porque, en nuestro ámbito geográfico, las licitaciones que se tienen que realizar en este año 2025 harán que, en los años anteriores, donde teníamos una media de 1.153 millones de euros en los últimos seis años o más de 1.300 millones en el último año (2024), se conviertan en licitaciones superiores a los 2.500 millones en solamente un año. Será, por tanto, un año de dos por uno, ya se que lograrán avances que duplican los logrados el pasado año, que ya de por sí ha sido récord para el Corredor Atlántico.
> ¿Cuáles son los principales retos encima de la mesa?
Ramón Valdivia
El crecimiento de las empresas y la de su rentabilidad, en un contexto de inestabilidad normativa, inseguridad jurídica y aumento de costes; la escasez de conductores profesionales; la digitalización como palanca para mejorar la competitividad; cómo lograr una transición energética realista y justa; y la promoción de una percepción social positiva de un sector que es estratégico para el funcionamiento de nuestras cadenas de suministro y el bienestar de nuestra sociedad.
Jordi Espín
El reto es que dejemos de pensar en los temas que centran el debate hoy, la digitalización, los nuevos combustibles, la eficiencia, la concentración de carga, la falta de conductores, para verlos como meros elementos de un debate que va más allá de ellos, siendo ellos sólo síntomas para abordar la coherencia de la cadena de suministro y la nueva movilidad que se nos presenta bajo el lema de la movilidad de que se encoge (shrinking mobility), la que se enfoca en la productividad y la excelencia para evitar mermas.
Marcos Badenes
La patronal Aldefe pone encima de la mesa las dificultades de nuestro sector, el aseguramiento de las cámaras frigoríficas, la contención en los gastos energéticos, la adaptación de las instalaciones con CFCs a la normativa con una “descarbonización sostenible”, la actualización de los costes a nuestros clientes, así como todo lo referido a eficiencia energética y estandarización normativa. En este sentido, cabe destacar el principio “no más normas, sí mejores normas”, lo que conlleva una simplificación normativa y no continuar con duplicidades o triplicidades de normas sobre el mismo tema.
Nuria Lacaci
Destacaría la transición hacia la descarbonización, con la incorporación de tecnologías limpias y la adecuación a zonas de bajas emisiones, algo que exige fuertes inversiones en renovación de flota. También persiste la escasez de conductores, un problema estructural agravado por la falta de atractivo de la profesión y que requiere de soluciones imaginativas.
Otro desafío importante es la subida de los costes, impulsada por el uso de combustibles renovables y la implantación de nuevos peajes. Además, el avance de la digitalización, aunque esencial, plantea retos de adaptación para micropymes y autónomos.
Finalmente, tenemos el reto de incrementar la intermodalidad. Para ello, es necesario adaptar las infraestructuras ferroviarias, proceso que ya se ha iniciado y que se prolongará hasta 2027, provocando, mientras tanto, el abandono del ferrocarril por parte de los cargadores.
Sin duda, la publicación de la revisión del Anexo IX del Reglamento General de Vehículos nos ayudará a afrontar estos retos desde una posición mejor.
Juan Gatnau
Los retos del sector no son otros que conseguir el diálogo con las diferentes administraciones, intentando transmitir las necesidades y dificultades derivadas de la actividad singular que realizamos, en unos momentos económicos cada vez mas críticos, con demandas más tensas, en los flujos de producción, que precisan de respuestas rápidas del transportista y que casi siempre vienen ralentizadas por una burocracia del siglo XXI.
Juan Diego Pedrero
Superar los años 2025 y 2026, que van a ser difíciles por los comentarios anteriores (obras en la red) y poder llegar al 2027 sin “muertos” por el camino.
Ramón García
La logística enfrenta grandes desafíos, siendo uno de los más críticos la falta de profesionales capacitados, especialmente en habilidades digitales y sostenibles, que afecta al 94,2 por ciento de las empresas, según el estudio “El Gran Libro de la Supply Chain en España 2024. Un sector en movimiento”, desarrollado junto a ManpowerGroup. Esta carencia limita la capacidad para adaptarnos a un entorno en constante evolución, donde la digitalización y la sostenibilidad son claves para competir y crecer.
Francisco Aranda
El gran reto de nuestra economía es mejorar su competitividad en todos los aspectos, para lo cual necesitamos el apoyo de las diferentes administraciones públicas. Nos encontramos ante un momento que exige una profunda transformación de nuestra economía, así que exige cambios a todos los niveles. Durante la última Asamblea General de UNO, así como en otras ocasiones,
hemos tenido la oportunidad de trasladarle al ministro Puente temas concretos, como la autorización definitiva de las 44 toneladas, una medida de la que llevamos hablando muchos años y que impulsará la productividad del sector, nos permitirá competir con muchos de nuestros vecinos europeos en igualdad de condiciones, reducirá el impacto medioambiental, y ayudará a contrarrestar la importante escasez de conductores.
Necesitamos que se favorezca una descarbonización racional, que no ponga en peligro la viabilidad de las empresas, mediante recursos económicos estables y plazos razonables; la puesta en marcha de las ZBE con normativas armonizadas; el impulso de los puntos de recarga eléctrica (estamos a la cola de Europa); y formar parte de la agenda del Gobierno para convertir España en un hub logístico mundial, tarea en la que estamos todos inmersos.
También es clave impulsar la capacitación de los profesionales y atraer talento joven para asegurar el relevo generacional. El petróleo del futuro va a ser el capital humano y necesitamos que en nuestro sector haya apoyo económico para la formación de nuestros futuros trabajadores.
El Ministerio de Transportes tiene que seguir invirtiendo en infraestructuras, lo cual es esencial para consolidar el transporte intermodal (con especial hincapié en el modo ferroviario); y, por supuesto, reformular el obsoleto sistema actual paraduanero.
Por otro lado, estamos a la espera de la aprobación definitiva de la Ley de Movilidad Sostenible. Desde UNO valoramos positivamente la posibilidad de contar con un marco normativo que actúe como guía estratégica, lo que nos permitirá tener claridad sobre los objetivos que se deben cumplir y aportará seguridad jurídica. No obstante, existen diversos aspectos de dicha ley cuya afectación y forma de implementación deberán ser evaluados, ya que consideramos fundamental no olvidar que el primer pilar es el de la sostenibilidad económica de esta transición. Es decir, esta normativa no puede significar nuevos impuestos o tasas para nuestro sector.
En el ámbito laboral hay que avanzar en la línea contraria de lo que ha hecho la ministra Yolanda Díaz, por culpa de la cual hemos perdido competitividad y seguimos siendo campeones de Europa en paro, en paro juvenil y en paro femenino. Hay que avanzar, a través del diálogo social, hacia un marco laboral más flexible, reducir las abultadas cotizaciones sociales, e impulsar políticas que rebajen nuestras sonrojantes cifras de absentismo. En este sentido, me parece escandaloso que tengamos tasas de absentismo superiores a las de una pandemia, no se ofrezca ninguna solución desde el actual Ministerio de Trabajo y se impida que las mutuas gestionen las altas. En concreto, ahora las bajas médicas de más de un año se han incrementado un 215 por ciento respecto a hace sólo cuatro años. Eso es insostenible.
Ovidio de la Roza
Algunos ya los he mencionado. Por ejemplo, la transición ecológica: nos preocupa la presión que existe por descarbonizar el transporte. Necesitamos soluciones realistas, accesibles y que no perjudiquen la competitividad del sector. Las empresas y autónomos del transporte de mercancías por carretera, llevan tiempo comprometidas con la sostenibilidad, utilizando siempre flotas y combustibles menos contaminantes, pero lo cierto es que en España y también en el ámbito europeo, se apuesta solo por la electrificación, sin tener en cuenta que para el transporte pesado es todavía una solución ineficiente por la falta de infraestructura de recarga y por el hecho de que los vehículos no están diseñados con la autonomía necesaria para realizar largos recorridos.
Además, faltan ayudas a la renovación de flotas. Resulta incompresible que ahora que se han eliminado los límites del Reglamento de minimis, una reclamación histórica de la CETM, no se pongan en marcha nuevas convocatorias de ayudas, sin olvidar que las que se aprobaron durante este año fueron destinadas principalmente al achatarramiento.
La escasez de conductores: el grupo de trabajo con el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible avanza a un ritmo muy lento y es un problema que venimos arrastrando durante años y amenaza el futuro del sector. Necesitamos nuevas políticas que ayuden a dignificar la profesión, facilitar el acceso y la captación de nuevos profesionales. En relación a esto, nos preocupa también la falta de aparcamientos seguros y el trato que reciben los conductores por parte de los cargadores, algo que no ayuda a fomentar el relevo generacional.
Por otra parte, necesitamos un marco normativo equilibrado, el exceso de normativa junto a las crecientes obligaciones administrativas y fiscales no hace otra cosa que poner trabas al sector.
Hay muchas más cuestiones en las que el transporte de mercancías por carretera necesita avanzar, como la adopción de nuevas tecnologías, que requiere la inversión y adaptación por parte de las empresas, la mejora de la Ley de la Cadena de Transporte, habrá que ver como repercute la inclusión del transporte en el Régimen de comercio de derechos de emisión, y seguir luchando por reclamaciones históricas como la creación de corredores específicos con el objetivo de que no existan restricciones a la circulación de camiones.
En definitiva, tenemos mucho trabajo por delante y esperamos que el Gobierno apoye y establezca medidas realmente efectivas para poder afrontar estos retos.
J. Andrés Arribas
A pesar de lo dicho anteriormente, el gran reto sigue siendo ganar cuota en el transporte de mercancías por ferrocarril para alcanzar el objetivo del 10 por ciento en el 2030. Y para ello, deben respetarse los plazos de las obras, que no existan demoras en su ejecución y priorizar los corredores que están señalados como vías de absorción de masa crítica para trasladar cargas de la carretera al ferrocarril. La prolongación de la autopista ferroviaria desde Madrid a Entrocamento en Portugal, o el eje Algeciras-Zaragoza, entre otros, deben tomar celeridad. La inversión en locomotoras y vagones destinados a estas autopistas ferroviarias se han hecho, ya están disponibles y si no logramos que empiecen a rodar, se nos va a añadir otro problema de credibilidad y, sobre todo, económico.
Fanny Torras
El largo plazo, ya no existe y el medio plazo es el nuevo corto plazo.
El principal reto que tenemos es ser muy flexibles en todas nuestras actividades, para adaptarnos a los cambios del entorno, que cada vez son más rápidos e inesperados y con una afectación mayor, con el fin de asegurar la capacidad de servicio a un precio competitivo.
La implantación y desarrollo de las políticas medioambientales y de seguridad en las empresas.
La adaptación del sector del transporte a las 44 toneladas.
Enric Ticó
De un tiempo a esta parte, más allá de las cuestiones operativas y de negocio de la empresa, el principal reto al que se enfrentan nuestros miembros es el de poder estar al día de toda la vorágine normativa a la que nos enfrentamos (especialmente la proveniente de la UE). Está resultando muy complejo para ellas poder adaptarse a unos requisitos cada vez más exigentes y a la imposición de una mayor burocracia. Otra cuestión que sigue en el debe de muchas empresas es la de avanzar en digitalización. A esto se añade una situación económica gris.
Juan José Gil
Respecto a las necesidades para el sector, seguimos insistiendo en dotar de certidumbre en el marco regulatorio que se le pretende imponer y que éste sea realista, en especial en toda la política medioambiental y de descarbonización del sector, que impida la expulsión de una parte de los que actual operan en el sector, especialmente de los pequeños empresarios, por no disponer de capacidad financiera suficiente para poder adaptarse a las nuevas exigencias en cuanto a su flota o gravámenes tributarios que se pretenden poner en vigor a corto plazo. Tampoco hay que olvidar el problema del relevo generacional en un sector con una edad media cercana a los 50 años, con un tercio de los profesionales en edad de jubilación en los próximos 10 años, lo que hace imprescindible abordar dicha cuestión crítica por parte de las administraciones con planes que incentiven la entrada de nuevos profesionales.
Antonio Pérez Millán
El transporte intermodal terrestre sigue abandonado. No hay un solo responsable en el Gobierno que esté al cargo del transporte intermodal y que persiga una mejora del mismo. Hay una falta de interlocución, de coordinación y de planificación tremenda.
Carmelo González
Tendríamos para escribir un libro de muchas páginas. Los retos son claros y repetidos hasta la saciedad, como la falta de profesionales, especialmente de conductores; la descarbonización; la digitalización y la mejora de la rentabilidad de las empresas del sector.
Y no me quiero olvidar el transporte combinado, pendiente de definir en la UE, y al que el sector de la carretera ve como un colaborador necesario, pero recelamos de que sean el resto de modos de transporte los que se llevan toda la inversión, mientras la carretera se queda fuera de la inmensa mayoría de las ayudas.
Lo triste es que, teniendo en cuenta las fechas en las que estamos, podemos decir que durante el pasado año apenas hemos avanzado en estos asuntos, y esto es algo que le reclamamos a la Administración.
José Luis Romero
Junto al ETS, las materias prioritarias fijadas por la Asamblea de Anesco sobre las que trabajar durante los próximos meses son: el relevo generacional; la seguridad laboral; la modificación de la Ley de Puertos; la mejora en los controles de entrada y salida de los recintos portuarios y la necesidad de habilitar ayudas para la aplicación de las directivas relacionadas con el ‘Fit for 55’.
Antonio Llobet
Los Agentes de Aduanas y Representantes Aduaneros en 2025 se enfrentarán a un entorno dinámico y en constante evolución, donde la capacitación, la adaptación tecnológica, y la coordinación internacional serán clave para superar los retos y asegurar la eficiencia y seguridad en las operaciones aduaneras. De esos retos, ya los he comentado en la pregunta anterior.
Elena Seco
Resulta fundamental avanzar en la OMI para lograr unas reglas globales eficaces para el transporte marítimo, especialmente en lo que a las cuestiones medioambientales se refiere, y evitar así una mayor pérdida de competitividad de la industria europea que no se encuentra en sus mejores momentos. La reunión del MEPC 83 de la Organización Marítima Internacional que se celebrará a comienzos de abril será fundamental en este sentido, así como para solucionar las lagunas denunciadas por el sector en el índice de intensidad de carbono, por su ineficacia para promover la eficiencia energética al operar determinados tipos de buques.
También es necesario que se impulse la producción de combustibles renovables para el transporte marítimo. La actual falta de combustibles ecológicos a precios competitivos amenaza el éxito de la transición energética de nuestro sector y podría convertir las normas europeas en simples medidas recaudatorias.
José Antonio Sebastián
2025 será un año clave para lograr avances significativos en la Organización, Gestión y Desarrollo del Corredor Atlántico. Los principales retos, pues completar nuestra red de malla. Tenemos abiertos muchos frentes: tenemos por un lado la ‘Y’ Vasca y su continuidad hacia abajo con el Burgos-Vitoria; la continuidad entre Palencia y Cantabria, Palencia-Alar del Rey. Tenemos también que continuar con las actuaciones en Asturias o completar la red ferroviaria gallega. También hay que continuar con la red mallada en Castilla-La Mancha, ya no solamente con la aprobación del paso de Toledo y el paso de Talavera, dentro la nueva línea de alta velocidad que va a conectar con Extremadura, sino también la electrificación del Humanes-Talayuela o también el nuevo tramo que se ha incorporado al Corredor Atlántico en 2024 dentro de esta misma línea: el Mérida-Puertollano. Y sobre todo las conexiones con el sur de España, el Algeciras-Bobadilla, evidentemente de red básica (cuyo horizonte temporal es 2030), pero también en las conexiones con Huelva o con Cádiz, que también son de primer nivel. Y todo eso sin olvidarnos de las conexiones transfronterizas con Francia y Portugal, que también son una prioridad.
Por resumir, si 2024 ha sido un año de récord, 2025 va a ser un año de dos por uno de todo lo que se va a lograr. El reto, por tanto, es conseguir avanzar en esa red mallada que tenemos que desarrollar dentro del Corredor Atlántico.
> ¿Qué necesita el sector? ¿Cuál sería la ‘carta a los Reyes Magos’?
Ramón Valdivia
Nuestros deseos de cara a 2025 podemos resumirlos en cuatro:
Reclamamos una transición energética realista, justa e inclusiva. Pedimos que se respete el principio de neutralidad tecnológica de forma que se incentive el uso de un mix energético que, además de la electromovilidad, también contemple el hidrógeno verde, el gas natural vehicular y los combustibles renovables.
Aligerar la asfixiante carga impositiva y de costes sociales que sufre el transporte por carretera. Este sector ya desembolsa 12.000 millones de euros anuales a las arcas públicas, la mayor parte procedente del Impuesto Especial sobre los Hidrocarburos.
Acabar con la inseguridad jurídica y los constantes cambios normativos, tanto en el ámbito doméstico como europeo, que dificultan la competitividad de este sector. Un ejemplo es la norma que obligaba a que los camiones regresaran cada ocho semanas al centro operativo de su empresa de transporte, dentro del Paquete de Movilidad, y que la Justicia europea ha tumbado este año.
Es crucial para nuestro sector tener un marco regulatorio armonizado, estable, claro y confiable en toda la UE. Sin seguridad jurídica, las decisiones de inversión para 2030 que nuestros miembros, sus clientes y sus proveedores están adoptando ahora, podrían generar grandes problemas.
Mucha más atención a los temas relacionados con el transporte por carretera y soluciones prácticas para nuestras empresas transportistas por parte del Ministerio capitaneado por Óscar Puente. En febrero, el Ministerio y el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), en el que participa Astic, nos reunimos para reactivar los cuatro grupos de trabajo que abordan los principales retos del sector: la escasez de conductores profesionales, la descarbonización, la digitalización y la aplicación efectiva de la Ley de Cadena de Transporte. Estos grupos fueron creados en la legislatura anterior. Desde entonces, los avances han sido prácticamente nulos, lo cual es muy preocupante.
Jordi Espín
El sector necesita concentrarse en la construcción (vamos tarde, llevamos demasiado tiempo de preparación) del escenario logístico para que invierta definitivamente en el talento y la tecnología, y que estos elementos condicionen y abastezcan un marco de trabajo donde la rentabilidad, la sostenibilidad y la resiliencia se combinen, mediante la colaboración entre agentes y actores, para crear un tejido logístico robusto, ajeno a la disrupción y enfocado a la estabilidad.
Para ello, necesitamos a todas las partes, el Regulador para que deje de publicar sólo normativa y sea el motor que fomente también las sendas de cooperación y estimulación logística, a las navieras que dejen de legitimar un negocio basado sólo en accidentes que estimulan la opacidad, a los agentes logísticos para situar al conductor (las personas) al frente y la carga (el elemento generador de riqueza) en el centro mediante la utilización de estándares universales y creando nuevos indicadores de compromiso y análisis de la realidad actual.
Marcos Badenes
Para nuestro sector, lo más deseable es un crecimiento sostenido como hasta ahora, pero con una mayor contención de los costes ligados a la actividad, especialmente los energéticos, de aseguramiento y laborales. Con solamente esto, podríamos considerar que hay una buena perspectiva. Pero claro, la carta se quedaría corta. También queremos que nuestros asociados puedan descarbonizarse sin incurrir en costes alarmantes usando gases A2L, así como que, por fin, nos consideren electrointensivos y con ello se abran auténticas ayudas sectoriales desde las distintas administraciones. En definitiva, que la Administración, y, por añadidura, los ciudadanos nos conozcan como sector.
Nuria Lacaci
Nuestra carta incluiría incentivos económicos y ayudas a transportistas, pero también a cargadores, para abordar la transición hacia tecnologías de transporte más limpias. También sería crucial un marco regulatorio armonizado, estable y claro, que permita a las empresas planificar sus estrategias a largo plazo y acometer las inversiones necesarias.
Además, el sector necesita un apoyo decidido a la digitalización, especialmente de las micropymes y autónomos.
También pedimos que haya muchos conductores profesionales, porque cuando la demanda de consumo vuelva a despegar, vamos a tener graves problemas de capacidad.
Y por pedir, también nos gustaría más inversiones en infraestructura, así como ‘ecoincentivos’ a los cargadores para combinar diferentes modos de transporte de forma eficiente y competitiva.
Juan Gatnau
Nuestra carta a los Reyes Magos, común de sector, no es otra que la de una petición clara de voluntad de ser europeos, no deseamos sentirnos como un mercado de país periférico. Normas claras, mercado uniforme, inspección ordenada y coherente, en todo el territorio nacional, en definitiva, sentirnos como un país que forma parte de un mercado común, con las mismas reglas de coherencia y competitividad.
¡Que la magia de la Navidad nos acerque hacia ese deseo!
Juan Diego Pedrero
Que el Ministerio de Transportes continúe la acertada política de ‘ecoincentivos’ al sector ferroviario para los próximos años y que se programe un nuevo plan de ayudas específico para el sector ferroviario que incluya la migración tecnológica a los sistemas ERTMS embarcados.
Ramón García
La carta a los Reyes Magos incluiría tres grandes prioridades: visibilidad, innovación y formación.
Popularidad para atraer nuevo talento. Es fundamental proyectar una imagen de la logística como una actividad estratégica, dinámica y llena de oportunidades. Mostrar el impacto que tiene en la vida diaria y destacar casos de éxito podría inspirar a las nuevas generaciones.
Innovación, para potenciar la digitalización y avanzar hacia operaciones más eficientes y sostenibles. Herramientas como el eCMR, los gemelos digitales o el uso de big data son indispensables para alimentar los algoritmos de inteligencia artificial, que serán claves en la optimización de procesos y la toma de decisiones así como la generación e implementación de estándares. A su vez, estas tecnologías deben alinearse con los objetivos de sostenibilidad, como la reducción de emisiones establecida en la Agenda 2030, promoviendo un equilibrio entre eficiencia y respeto al medioambiente.
Formación, para liderar la transformación de la cadena. Es imprescindible invertir en el desarrollo continuo de las habilidades técnicas y blandas de los profesionales, desde competencias digitales hasta liderazgo y colaboración. Programas especializados, como el Máster CEL en Dirección Logística y Transformación Digital o las certificaciones de ASCM ofrecen una solución a esta necesidad, ayudando a cerrar la brecha de competencias y preparar al talento para los retos del futuro.
Francisco Aranda
En cuanto a la lista de propósitos de año nuevo, es imprescindible que mejore nuestro marco regulatorio en materia laboral porque hoy perdemos competitividad en ese aspecto a borbotones. Necesitamos que vuelva el diálogo social para que se adopten medidas equilibradas que favorezcan a todos. Hasta ahora, la ministra Díaz sólo ha impuesto medidas que exigían sacrificios a las empresas a cambio de nada. Fruto de todo ello, la brecha de competitividad entre España y la eurozona se ha agravado. En concreto, según BBVA Research, nuestro mercado de trabajo genera ya un 25,5 por ciento menos de valor añadido por cada hora que la eurozona. La consecuencia la tenemos en los datos y es que además de tener una elevada tasa de paro, cada vez hay menos contratos indefinidos a tiempo completo porque los costes no han hecho más que agravarse en un marco de máxima rigidez. El propio Banco Europeo de Inversiones dice en su último informe sobre España que nuestra regulación laboral es el principal freno a las inversiones.
Por otro lado, la cadena de suministro ya es suficientemente madura para abordar una simplificación de la negociación colectiva con tres convenios de carácter nacional, uno para el reparto urbano, otro para el transporte y un tercero para la logística, independientes cada uno de ellos. Así favorecemos la seguridad jurídica y generamos marcos para que no haya espacios para la competencia desleal. Así estaremos legitimando a todo el sector e introducimos racionalidad en la negociación colectiva.
Por otro lado, hay que seguir haciendo inversiones en infraestructuras y modernizando las existentes, avanzando más en el modo ferroviario porque mientras que no alcancemos cuotas de dos dígitos en el transporte de mercancías por ferrocarril no podremos decir que somos un país logísticamente competitivo.
Hay que plantearse seriamente incrementar la oferta de mano de obra y para ello es necesario activar a los demandantes de empleo locales con políticas activas de empleo exigentes, apoyar la inmigración con estrategias de formación e incentivar más la incorporación de la mujer al mundo laboral. En el caso del transporte, es urgente contar con una FP para conductores porque así además estaremos ayudando a dignificar el sector.
Es necesario reducir nuestros costes no salariales para que así puedan mejorar los salarios reales. No tiene sentido que el país con más paro de la OCDE tenga uno de los impuestos más elevados al empleo.
También tenemos que apoyar la inversión privada y la creación de empresa y no poner obstáculos administrativos o fiscales a las empresas que quieren crecer.
Ovidio de la Roza
Nuestra carta a los Reyes Magos, o más bien a nuestros responsables políticos, incluye peticiones que son imprescindibles para asegurar la viabilidad de las empresas y autónomos del transporte de mercancías por carretera: medidas efectivas para solucionar la escasez de conductores, ayudas para afrontar la transición energética, inversión en áreas de descanso y en la mejora de las infraestructuras y, por último, que el reconocimiento del papel esencial del transporte perdure los 365 días del año y no solo cuando ocurren tragedias como la de la DANA.
Referente a esto, me gustaría que en este nuevo año no se olviden de las familias y negocios afectados que, sin duda, seguirán necesitando ayuda. En cuanto a las empresas y autónomos afectados de nuestro sector, las ayudas son insuficientes y, además, muchas, al no estar domiciliadas en las zonas afectadas, no pueden acceder. Es urgente que se resuelva esta cuestión y que los diferentes gobiernos no den la espalda a quienes se han visto golpeados por esta catástrofe.
Por último, quisiera expresar un deseo que va más allá de cualquier reivindicación: que el 2025 nos encuentre más unidos y fuertes que nunca. Estoy seguro de que juntos podremos superar los retos del sector y mirar al futuro con optimismo.
J. Andrés Arribas
Hilvanando con la pregunta anterior, que los trabajos planificados en la red para 2025 se cumplan en tiempo y forma. Que se publique de una vez el SAPET, para que ayude a compensar a los operadores los costes extraordinarios por todas las perturbaciones ocasionadas por las obras. Que ante esta situación, los cargadores pongan las luces largas y hagan una apuesta por este modo sostenible de transporte ferroviario, aunque para ello se tenga que optar por fórmulas atractivas de incentivos o programas de estímulo a la demanda.
Fanny Torras
Unidad de acción y visión común para obtener las mejoras que necesitamos en un entorno más estable y previsible.
El sector necesita: talento, digitalización, hacer atractiva la profesión de conductor, mayor capacidad de carga (44 toneladas, camiones modulares, tren…), una Europa conectada por la normativa del transporte terrestre, apuesta firme por la intermodalidad, con el Corredor del Mediterráneo, que lleva 12 años de retraso, una Europa más industrializada para perder la dependencia de otros continentes y asegurar puestos de trabajo, armonía y equilibrio de costes, menor presión burocrática y unidad de criterios y gestión en todo lo referente a CAE, y nuevos biocombustibles y camiones eléctricos.
Enric Ticó
Un marco de juego justo y realista. Por una parte tenemos unos objetivos de descarbonización que, de no modificarse, puede llevarse por delante muchos puestos de trabajo (un ejemplo es la necesidad de electrificar las flotas, en lugar de impulsar otras tecnologías neutras, o el ETS). También necesitamos mejoras en la normativa de las operaciones de handling y del transporte marítimo.
Otra cosa que llevamos esperando desde hace tiempo es la creación de observatorios por parte de la Administración: necesitamos disponer de información sobre comercio, operaciones, controles aduaneros, tiempos de procesos, etc. Sin estos datos resulta muy difícil adoptar medidas de mejora.
Antonio Pérez Millán
Al igual que el Consejo Nacional de Transportes Terrestres, del propio Ministerio de Transportes, seguimos reivindicando una Unidad de Intermodalidad, dentro del Ministerio, para el impulso de la intermodalidad.
Una segunda medida sería evitar el terrible castigo a la intermodalidad si se produce el aumento de 40 a 44 toneladas en transporte de carretera. En ese caso, la intermodalidad debe mantener el diferencial y subir a 46 y 48 toneladas (con tractora de 2 y 3 ejes, respectivamente).
Una tercera medida serían unos ‘ecoincentivos’ ferroviarios directamente al prescriptor, a la demanda. No estamos contra los ‘ecoincentivos’ a la oferta, pero son imprescindibles, y más importantes, los ‘ecoincentivos’ a la demanda, tal y como ocurre en transporte marítimo. No hay razón para esta discriminación de modos.
Por último, son imprescindibles ayudas para compensar los perjuicios generados por todas las acciones sobre la infraestructura ferroviaria, (Sistema de Ayudas por Perturbaciones Extraordinarias de Tráfico, SAPET).
Carmelo González
La carta sería algo así. Queridos Reyes Magos:
Con el servicio de calidad y puntualidad que el transporte de mercancías por carretera aporta a toda la actividad industrial y comercial estamos seguros de que nuestras peticiones os llegarán.
Esta es una carta sincera, carente de egoísmo, escrita con el corazón y con la cabeza, en la que solo os pido aquello que es imprescindible para la buena marcha de nuestro sector. Sé que se parece mucho a la carta del año pasado, pero si insisto es porque España necesita un transporte de mercancías sano, que siga generando riqueza y empleo, y aportando un servicio de calidad para la economía.
La cuestión primordial, en la que nos debemos implicar tanto la Administración como todos los integrantes de la cadena de suministro, no es otra que poner en valor la profesión de transportista, con el fin de ser capaces de atraer nuevos profesionales con los que continuar la actividad, para lo que deberemos mejorar las condiciones económicas y el trato dispensado.
El otro gran reto, acorde a los tiempos que corren, es la descarbonización, para lo que necesitamos que se alarguen los plazos marcados por la UE, establecer la neutralidad energética -recordemos que no todo es electrificar- para que sea una transición pacífica y dotar las ayudas económicas que impulsen este proceso.
Y finalmente, para no pedir demasiado, deseo que no se incremente la fiscalidad del sector, en cuestiones como el combustible o los peajes, y tengamos bonificaciones fiscales para invertir en vehículos con los que descarbonizar. Y no quiero dejar de recordar que todos los fondos que se recauden del sector deben retornar al mismo.
Gracias por escucharme, creo que los transportistas hemos sido pacientes, hemos colaborado con la administración y, por lo tanto, confiamos en que se consideren nuestras peticiones, de modo que este año sea productivo y avancemos en mejorar el sector con una regulación justa y adecuada.
José Luis Romero
La primera de las peticiones a los Reyes Magos es la necesidad de ayudas para hacer frente al cumplimiento de las exigencias medioambientales de la UE. Y es que uno de los grandes desafíos a los que nos enfrentamos es el de la transformación de la maquinaria que se precisa para operar, encontrar la tecnología limpia más adecuada y contar con la financiación necesaria para acometer estas inversiones que, hoy por hoy, tienen costes muy elevados, incluso 3 o 4 veces superiores.
El resto de los temas (el relevo generacional, la seguridad laboral, etc.) sobre los que trabajar son igualmente primordiales para nosotros pues persiguen un único objetivo, la mejora de la competitividad del sector empresarial de la estiba.
Antonio Llobet
Nuestro sector necesita estar al día con las normativas y tecnologías en constante evolución. Necesitamos programas de formación continua y sistemas de certificación que nos aseguren estar siempre bien preparados para nuestros roles. Necesitamos sistemas avanzados de gestión aduanera que estén finalmente acabados; llevamos desde el año 2016 integrándolos y hoy en día siguen algunos sin ser concluidos. Pedimos mayor reconocimiento profesional; un estatus claro que defina nuestros derechos y responsabilidades, y que refleje la importancia de nuestro trabajo en la facilitación del comercio y la seguridad fronteriza. También nos gustaría tener una voz activa en la formulación de políticas aduaneras. Nuestra experiencia en el campo es invaluable para crear normativas realistas y efectivas. Y, por último, pedimos apoyo para fortalecer nuestras redes profesionales tanto nacionales como internacionales para hacer llegar nuestras reivindicaciones a la UE. En concreto, al Consejo, a la Comisión y al Parlamento Europeo.
Elena Seco
Los armadores españoles ya han invertido más de 1.000 millones de euros en buques, combustibles y tecnologías para reducir el consumo de combustible y mejorar la eficiencia energética, con una reducción estimada de las emisiones de gases de efecto invernadero del 7 por ciento.
Estos datos podrían crecer exponencialmente si, de la misma manera que están haciendo otros países europeos, España asumiera la transición energética del transporte marítimo como un reto compartido, en el que la colaboración público-privada es necesaria para acelerar el proceso y escalar la implantación de tecnologías innovadoras y el desarrollo de nuevos combustibles sostenibles.
l sector necesita que se apruebe ya el plan de descarbonización del transporte marítimo anunciado por la Dirección General de la Marina Mercante y que se le asignen recursos económicos. Los ingresos de la inclusión del sector marítimo en el régimen de comercio de derechos de emisión de la UE deberían revertirse, íntegramente, en el sector
José Antonio Sebastián
Tenemos muchos trabajos pendientes, entre ellos varios estudios para el desarrollo de infraestructuras en el Corredor Atlántico. Por ello, la carta de los Reyes Magos sería que las mercancías por ferrocarril empiecen a crecer después de todas las obras que se están realizando, que las obras se concluyan en plazo, es decir, que no tengamos imprevistos o complicaciones en las mismas, para que todo pueda desarrollarse conforme a lo previsto. Tenemos que sumar más cosas positivas que negativas. Que lo positivo triunfe sobre lo negativo.
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