Asume las líneas fijadas por sus hermanos más pesados y será clave en la ofensiva comercial del constructor italiano en 2008.
El Eurocargo, lanzado en 1991, ha ganado más premios que cualquier otro camión en la historia del transporte, convirtiéndose en modelo de referencia, pero Iveco sabe que si no renueva sus atractivos, esa posición de ventaja desaparecerá por mucho que se hayan entregado más de 400.000 ejemplares del modelo hasta finales de 2007
Iveco no ha desvelado demasiados detalles técnicos de cómo será el modelo, si se excluyen la fanfarria “marketiniana” de los comunicados de prensa. La fotografía difundida inicialmente es del estilo que se ha impuesto desde hace algún tiempo en EEUU, es decir, con un modelo muy retocado superpuesto sobre una fotografía natural, como se hacía en los tiempos de las fotos de blanco y negro a base de pincel. En ella puede verse que la estética de la nueva familia Eurocargo asume las líneas impuestas por sus hermanos más pesados. Una novedad es la calandra abisagrada, que ofrece la posibilidad de personalizar el vehículo con el logo del transportista, y el parachoques delantero, que lleva integrados nuevos grupos ópticos.
Los parachoques y los guardabarros también se pueden conseguir en el mismo color de la cabina. Se promete que el nuevo Eurocargo mantendrá e incluso aumentará aquella versatilidad que siempre fue una de sus características más destacadas. Habrá más versiones disponibles y una amplia gama de equipamientos optativos que permitirán afinar en la búsqueda del vehículo más idóneo para su ámbito de actividad: distribución, construcción, obras públicas y servicios municipales. También se contará con una gama renovada de transmisiones manuales, automáticas y automatizadas.
De las cajas de cambios manuales, más ligeras, se asegura que mejorarán el rendimiento del vehículo y, gracias a una inserción muy precisa de cada marcha, obtenida con sincronizadores o sistemas de asistencia, garantizarán un buen rendimiento y una vida prolongada del cambio. Las habrá de 5, 6 y 9 velocidades. Los cambios automatizados Eurotronic de ZF funcionan con un programa informático avanzado que optimiza el consumo, insertando las velocidades en el momento oportuno. Finalmente, se dispondrá de cambios automáticos Allison con convertidor de par, que por primera vez estarán disponibles también en los modelos de 7,5 a 12 toneladas.
La propulsión seguirá encomendada a los motores Tector, desarrollados a partir de motores Cummins, como también hace DAF en su gama LF. Los motores Tector, cumplen con la normativa Euro 5 sobre limitación de emisiones contaminantes que entrará en vigor en 2009, utilizando para ello la reducción catalítica selectiva (SCR) que pulveriza una solución de urea en agua al 20 por ciento de concentración (AdBlue) sobre los gases del escape. En la cabina se ha mejorado, según indica el constructor, la habitabilidad y el paso de un lado a otro de la misma. El salpicadero compacto facilita el uso de los instrumentos, así como la lectura de los indicadores más frecuentes, situados cerca del puesto de conducción.
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