El nuevo complejo intermodal está previsto que dé inicio a sus operaciones en 2013.
Las privadas Acotral, Lamaignere y Cointer asumirán finalmente el 53 por ciento de participación del capital social de la nueva sociedad público-privada que se encargará de construir y explotar el futuro centro logístico intermodal ubicado en Aranjuez. La nueva instalación está previsto que dé inicio a sus operaciones en 2013
Acotral, Lamaignere y Cointer (Grupo Azvi) asumirán finalmente el 53 por ciento del capital de la nueva mercantil público-privada que se encargará del diseño, construcción y explotación del centro logístico intermodal de Aranjuez. De esta manera, la pública Adif ostentará el porcentaje máximo del capital previsto en el concurso convocado a principios de año (47 por ciento) y cuya apertura de plicas se concretó en junio.
Fuentes del sector encuadran esta decisión en el contexto de dificultades de financiación, lo que ya desanimó a otros grupos inicialmente interesados a la hora de presentar su oferta al citado concurso, y que habría empujado finalmente a las privadas seleccionadas a comprometer al operador público al máximo en la nueva sociedad. Precisamente, las diferencias en cuanto al porcentaje de participación final en la nueva sociedad mercantil han sido las que han generado un retraso de más de dos meses en la confirmación del proyecto, según apuntan las mismas fuentes.
La nueva sociedad público-privada, que explotará el nuevo centro logístico intermodal por un período de 25 años, nacerá con un capital social inicial de 4,5 millones de euros y tendrá que hacer frente a una inversión prevista en una primera fase de 13,1 mllones de euros, a los que se sumarán otros 8,5 millones en una segunda fase. La primera fase, cuya duración de las obras se estima en 12 meses y que deberá estar concluida en 2013, estará dirigida a convertir las actuales instalaciones de Adif en Aranjuez en una nueva terminal intermodal capacitada para la expedición y recepción de trenes de 750 metros de longitud y su tratamiento en zona de carga y descarga sin necesidad de fraccionarlos. La terminal contará con una capacidad de manipulación de 115.000 UTIs anuales y con un depósito de almacenaje de contenedores con capacidad para 1.920 TEUs.
Por su parte, la segunda fase, sobre la que no han trascendido plazos de ejecución, consistirá en una ampliación de la zona de carga y descarga de contenedores construida en la primera fase, así como a la urbanización de la zona de actividades logísticas. El complejo contará con 34 hectáreas de superficie propiedad del Adif, por lo que la nueva sociedad abonará un canon anual por el arrendamiento de las mismas.