Adif, más cauto en la nueva licitación de su terminal en Zaragoza-Plaza

Tal y como pretendía su actual presidente, recorta el plazo de adjudicación a 4 años y condiciona su prórroga a las inversiones.

Adif se ha mostrado más cauto en la nueva licitación de la gestión del centro logístico ferroviario de Zaragoza-Plaza. Tal y como pretendía su actual presidente, Gonzalo Ferre, la pública ha decidido recortar el plazo de adjudicación de la concesión de 10 a 4 años y condiciona la prórroga del mismo a las inversiones que se acometan

Adif ha reactivado, cinco meses después de la paralización del anterior, un nuevo proceso de adjudicación del contrato de gestión del centro logístico ferroviario de Zaragoza- Plaza. La concesión, que seguirá siendo bajo la modalidad de riesgo y ventura, ha sufrido un severo recorte en el plazo de adjudicación, de 10 a 4 años, tal y como pretendía el actual presidente de la pública, Gonzalo Ferre. De todas formas, el administrador de infraestructuras se ha reservado la posibilidad de establecer una prórroga en función de la presentación de un plan de negocio que contemple inversiones por encima del medio millón de euros y que deben de ser aprobadas por la propia Adif. A través de sucesivas prórrogas, el plazo se podría estirar hasta alcanzar también los 120 meses previstos en la anterior licitación.

El concurso para la adjudicación de la explotación de la terminal de Plaza Zaragoza fue paralizado a principios de año, en el momento en el que se produjo el último relevo en la cúpula de Adif. El nuevo presidente valoró, entre otras cosas, la necesidad de recortar el plazo de la adjudicación, al entender que los 120 meses previstos de entrada eran excesivos, según han relatado fuentes solventes. Además, la pública paralizó también el concurso de prestación por concesión de la terminal de Mérida (Badajoz), que está previsto que se reactive en breve, según reconocen fuentes sindicales.

El nuevo concurso establece también, en buena lógica, una rebaja del importe mínimo de licitación de 5,2 a 1,9 millones de euros. Al margen de esta cantidad, el contrato fija una renta variable anual que deberá abonar el adjudicatario de la concesión a Adif en función de las UTIs manipuladas, que asciende a un mínimo total de 597.780 euros por los cuatro años. El plazo para la presentación de ofertas finaliza el próximo 27 de junio y todo apunta a que volverán a concurrir las mismas tres ofertas del concurso paralizado hace unos meses, es decir, TMZ Services, Tercat y la UTE integrada por Noatum, Laumar Cargo y Logitren.

Fuentes del sector han señalado la necesidad de abrir la terminal hacia nuevos tráficos, puesto que “actualmente existe dependencia con el puerto de Barcelona”. Además, las mismas fuentes señalan que “sería preciso garantizar la competencia entre terminales, porque esto redundará en beneficio de todo el sector en Aragón”. La terminal movió cerca de 65.000 TEUs en 2012 (+14 por ciento).