El ‘no’ a la acción directa y a limitar la subcontratación, entre las propuestas planteadas, que han encendido a los transportistas.
Aecoc prioriza el aumento de la capacidad de carga de los camiones en la negociación abierta con el Comité para mejorar las relaciones entre transportistas y cargadores. La patronal de fabricantes y distribuidores dice ‘no’ a la acción directa y a limitar la subcontratación, principales reivindicaciones de la carretera, que critica las medidas
La asociación de fabricantes y distribuidores Aecoc, cuyo departamento de Logística dirige Alejandro Sánchez, lo tiene claro. “La competitividad de las empresas españolas pasa por la mejora de la productividad del transporte”, que supone “el 4 por ciento del precio de venta de los productos”. Para ello, la patronal apuesta por aumentar la capacidad de carga de los camiones y reclama la liberalización del acceso al transporte de contenedores en los puertos, mientras muestra su rechazo a la limitación de la subcontratación y a la acción directa, principales reivindicaciones de la carretera.
En cuanto a los plazos de pago y la cláusula automática del precio del gasóleo, la organización empresarial se ajusta “escrupulosamente” a lo que marca la ley. Las medidas propuestas por Aecoc están recogidas en un documento de trabajo, al que ha tenido acceso TRANSPORTE XXI, que ha sido remitido al Comité Nacional en el marco de las negociaciones entre transportistas y cargadores, retomadas recientemente tras casi dos años de ‘impasse’.
El borrador ha sido muy criticado por el sector del transporte por carretera. Empresarios consultados por este periódico subrayaron que “Aecoc sólo recoge sus necesidades, haciendo oídos sordos a las reclamaciones de los transportistas”. De hecho, la única medida en la que coinciden es en la oposición a la tasa por uso de infraestructuras. Eso sí, por si acaso, la asociación de empresas cargadoras advierte que “la Euroviñeta recaería completamente en las empresas de transporte, ya que sus clientes no pueden repercutirlo en el precio de sus productos”.
La respuesta más contundente a las propuestas de Aecoc ha llegado de la Asociación Española de Empresarios de Transportes Bajo Temperatura Dirigida (Atfrie), que preside José María Arnedo. La patronal señala, a través de un comunicado, que “todo el estudio está basado en vehículos con más capacidad de carga”, sin tener en cuenta, por citar un ejemplo, “una mejor y más eficiente gestión de sus almacenes”.
No hay que olvidar que la modificación de los pesos y dimensiones de los camiones es uno de los quebraderos de cabeza del sector, que ya criticó con dureza la prueba piloto desarrollada en Cataluña con los camiones de 44 toneladas. Aecoc defiende que el aumento de la capacidad de carga de los vehículos -el ‘megatruck’ de 25,25 metros y los camiones de 44 toneladas- permite una “reducción de costes por tonelada transportada”. En concreto, cifra en más de 4.000 millones de euros anuales el ahorro económico en España que supondría el traspaso de carga de los vehículos actuales a estos de mayores dimensiones.
La patronal de los ‘frigos’, por su parte, censura que “la productividad para los cargadores estriba en cargar más con el mismo precio, suponiendo que no acarrea más costes para una de las partes -mayor consumo y desgaste de los vehículos-. Como si fuera lo mismo arrastrar 40 toneladas que 44”. Por último, como réplica a las medidas de Aecoc, la patronal Atfrie enumera una serie de propuestas para mejorar la productividad del transporte sin necesidad de incrementar el número de toneladas transportadas.
Entre ellas, destacan la carga y descarga de los vehículos por personal al servicio de los cargadores, la eliminación de las paletas de intercambio, cuyas pérdidas o roturas suponen un coste mínimo de 300 euros por vehículo y año, o la eliminación de las restricciones genéricas a la circulación de camiones. El próximo encuentro entre Aecoc y el Comité está previsto para el 3 de julio. Y todo parece indicar que no habrá ‘fumata blanca’, ya que las posturas entre transportistas y cargadores están aún muy alejadas.