El Consejo Federal ha aprobado la exención del pago de peajes a los camiones propulsados por GNC y GNL.
Aunque la medida no es nueva, ahora se amplía la exención de pago a todos los camiones de más de 7,5 toneladas de MMA hasta el 31 de diciembre de 2023, tiempo suficiente para la recuperación de los mercados y la definición de cuáles serán las energías preponderantes en el transporte en las próximas décadas.
Las federaciones de transporte por carretera alemanas han acogido con satisfacción la medida, que renueva las exenciones temporales ya aplicadas anteriormente por el gobierno federal, pero echan de menos un incentivo completo como las ayudas para la compra de camiones de GNC y GNL. Aunque el gobierno no se ha manifestado sobre este punto, sí se ha reconocido que esta tecnología es una “alternativa madura, disponible y sostenible para el transporte de mercancías por carretera”.
Por otra parte, el gobierno austriaco ha levantado la prohibición del paso de camiones por el Tirol, siempre que sean de GNL, lo que significa que se les clasifica como un combustible de gas, pero no sujeto al impuesto y consideración de combustibles fósiles.
Se da la circunstancia de que en Alemania está abierto el debate sobre la promoción de los vehículos propulsados por GNC y GNL ya que se considera que no está nada claro que los camiones con propulsión a gas sean mucho más amigables con el clima y contribuyan a una reducción significativa de las emisiones de CO2.
A principios de mayo Martin Daum, jefe de la división de camiones de Daimler envió una carta abierta al Ministro de Transporte Federal, Andreas Scheuer, en la que señalaba que un camión de gas no puede ser “más amigable con el clima”. Daum afirmaba que todos los participantes del mercado son conscientes de que los requisitos climáticos de Europa para camiones pesados “solo se pueden lograr mediante una electrificación extensiva”.
La industria del gas alemana también ha entrado en el debate y Timm Kehler, director del organismo Future Natural Gas Forum, ha señalado que “nos sorprenden mucho” las palabras del representante de Daimler, “eso sólo puede explicarse por el hecho de que el grupo no tiene casi ninguna oferta de unidades de gas natural”.