La Autoridad Portuaria arranca la hoja de ruta para el cálculo de emisiones propias y de todos los operadores que trabajan en el enclave para implantar medidas para la mejora de la sostenibilidad ambiental.
La Autoridad Portuaria de Bahía de Algeciras impulsará la medición de su huella de carbono dentro de su Estrategia Verde, un plan de promoción del desarrollo sostenible de las actividades que se realizan en el interior de los puertos de Tarifa y Algeciras, incluyendo a todos los operadores que operan en las dársenas.
Para ello, contratará un estudio que permita identificar el cálculo de emisiones propias generadas por la Autoridad Portuaria, tanto las que son de su propiedad como las que están controladas por el organismo que preside Gerardo Landaluce. De esta forma, se identificará, entre otros, el consumo de combustibles fósiles, tanto de equipos propios como de maquinaria de estiba o de mantenimiento, y de las embarcaciones al servicio de la operación de buques. Y, por otro lado, se procederá a calcular las emisiones atribuibles a servicios portuarios y comerciales, las emisiones de las actividades de los concesionarios y las emisiones del tráfico terrestre y marítimo.
El objetivo es comparar con mayor precisión cuál es la reducción de la huella de carbono conseguida al implantar medidas que supongan cambiar el consumo de combustibles fósiles por consumo de energía eléctrica.
El puerto estima que el número de empresas que pueden ser objeto de los trabajos para medir la huella de carbono está entorno a 150 operadores. El contratista deberá comprobar si la empresa ya ha realizado el cálculo de su huella.
Para el cálculo de las emisiones, el puerto requerirá a las empresas de transporte los datos del número y tipología de sus camiones, mientras que para el tráfico marítimo se obtendrá como suma de las emisiones de combustibles fósiles por los motores de los buques y, en su caso, de la energía eléctrica suministrada a los buques desde tierra mientras estos permanecen atracados. Por otro lado, el enclave andaluz impulsará un segundo estudio para calcular la huella hídrica de las instalaciones.