Anave cree “insuficiente” el plan del Gobierno contra los piratas

Pide subir militares a los buques que operan en Adén porque los agentes privados sólo tienen armas cortas para repeler los asaltos.

Anave considera “insuficiente” la decisión del Gobierno de dar luz verde al embarque de agentes de seguridad privada en los buques españoles que transitan por el cuerno de África para hacer frente a los piratas. La patronal, que se reunirá con el Almirante de Acción Marítima, demanda el embarque de pelotones militares

El Ministerio del Interior, respondiendo a una petición de la cartera de Chacón, ha autorizado a los armadores que navegan por las peligrosas aguas de Somalia a llevar a bordo de sus barcos agentes de seguridad privada para hacer frente a los piratas de la región. Fuentes de la Asociación de Navieros Españoles (Anave), que preside Juan Riva, aseguran que la medida demuestra “la buena voluntad” del Gobierno para hacer frente a la piratería en el golfo de Adén, pero que “aporta poco” porque “la Ley de Seguridad Privada sólo permitirá embarcar efectivos con armas cortas, que son claramente insuficientes para repeler un ataque de los piratas, que, como hemos visto, se sirven de armamento de mayor calibre”. No obstante, la medida de Interior sí responde a la demanda de varios armadores españoles que operan en la zona, que veían como los barcos que tienen abanderados en pabellones distintos al español, caso de Madeira, sí podían llevar seguridad privada a bordo.

El cablero “Teneo”, perteneciente a Tyco Marine, ha sido el primero en obtener el permiso del Ministerio del Interior para llevar a bordo 10 agentes de una importante empresa de seguridad nacional. El buque español trabaja en las costas de Kenia en la ejecución de un contrato de instalación de cable submarino y, a pesar de contar con seguridad privada a bordo, ha pedido también ayuda militar. Según Anave, la decisión del Gobierno sería más efectiva “si se aprueba un decreto ex-profeso para el embarque de agentes de seguridad privados en los buques españoles que transitan por la zona”, unas palabras que vienen a subrayar la necesidad de flexibilizar la actual legislación en la materia, sobre todo en el capítulo de las armas, para que sea efectiva en la lucha contra los piratas somalíes.

También es cierto que el ministerio de Defensa ha pedido a Interior que flexibilizase los criterios exigidos a los mercantes para poder embarcar agentes de seguridad privada. Aunque la Ley de Seguridad Privada es tajante en el uso de armas cortas, Interior no ha desvelado si ha dado luz verde al uso de piezas de más calibre para los guardias embarcados en buques españoles. La decisión del Gobierno, que imita la adoptada por casi todos los países europeos que tienen flotas en la zona, se produce después del incremento del número de secuestros perpretados por los piratas en el Índico, que han ampliado su radio de acción. Uno de los más recientes fue el intento de secuestro de un buque italiano de pasaje al norte de las Seychelles, que fue abortado por las fuerzas militares de la UE y la OTAN desplegadas en la zona, entre las que se encontraba la fragata española “Numancia”.

Hasta hace poco, los piratas operaban en aguas próximas a la costas de Somalia. Pero, tras la ofensiva militar conjunta de la UE y la OTAN, han cambiado de estrategia y ampliado su campo de acción hasta las 400 millas, lo que complica aún más el trabajo de las fuerzas militares para dar cobertura a los buques que enfilan el Canal de Suez. En este contexto de recrudecimiento de los asaltos de los piratas, Anave y diferentes armadores mantendrán una reunión el próximo 14 de mayo con Emilio José Nieto Manso, Almirante de Acción Marítima, encargado de la protección de los intereses marítimos nacionales.

Según fuentes solventes, el objetivo del citado encuentro es seguir abundando en la petición de Anave de que Defensa embarque pelotonos militares en los mercantes españoles que transitan por el cuerno de África, que vienen a ser unos tres buques a la semana, tal como adelantó TRANSPORTE XXI en su edición del pasado 15 de enero. Defensa ve con buenos ojos la demanda de Anave, aunque los medios consultadas no ocultan que “este operativo es caro desde el punto de vista logístico porque implica abrir un base en la zona donde destacar a los efectivos para su posterior traslado a los barcos”. Anave tiene a su favor que el propio Ministerio de Defensa reconoce que la operación Atalanta se ha demostrado insuficiente para hacer frente a los piratas.