La estibadora del muelle Sur de la dársena catalana, del grupo Maersk, alcanza “niveles óptimos de productividad”.
APM Terminals Barcelona, una de las dos terminales especializadas en contenedores del puerto de Barcelona, mantiene la continuidad en su operativa de una forma normalizada y “sin demora en ninguna de las áreas que implica la actividad”, destaca la estibadora de A.P. Moller-Maersk, a través de un comunicado.
A pesar de las medidas de seguridad implantadas y las restricciones para frenar la propagación de la pandemia, se está operando “sin incidentes”. Es más, la terminal del muelle Sur alcanzó, la semana pasada, “niveles óptimos de productividad con una capacidad de ocupación estable que permite afrontar la actual situación”.
La inversión realizada por APM Terminals Barcelona el año pasado está ayudando a la compañía a “mantener una productividad elevada y hacer frente a estos momentos que son tan duros”, señala la misma nota.
La estibadora hizo una inversión de 47 millones de euros en la adquisición de nuevas máquinas, conexiones y otras mejoras en la terminal. Adquirió un total de 29 nuevas straddle carriers, fabricadas por Konecranes, con una capacidad de elevación de 50 toneladas hasta tres alturas.
Además, compró dos nuevas grúas super post panamax, que permiten operar portacontenedores de 18.000 TEUs y de 23 contenedores de manga. Con la nueva maquinaria, cuenta con un total de cinco grúas super post panamax, cinco post panamax y tres panamax. La estibadora también aumentó su capacidad reefer el año pasado. Sumó una nueva pasarela con 152 conexiones. Y ello ha supuesto incrementar el 31 por ciento los enchufes disponibles.