La subida de un 30 por ciento de las tasas del puerto de Gijón, anunciada recientemente por la Autoridad Portuaria, ha hecho saltar todas las alarmas en ArcelorMittal. El grupo siderúrgico, a través de un escueto comunicado, alerta de que este incremento de las tasas “perjudicaría la competitividad” de sus plantas y reclama al organismo portuario que revise la medida para evitar que se disparen sus costes.
ArcelorMittal Asturias asegura que “esta medida supondría un significativo incremento de los costes de explotación de la compañía, en un período ya de por sí complicado para la industria siderúrgica europea”. La compañía argumenta que el puerto de Gijón constituye una instalación “esencial”, ya que, a través de él, recibe 8 millones de toneladas de mineral de hierro y carbón siderúrgico y exporta cerca de 300.000 toneladas de productos al año.
Por último, la multinacional recuerda que “para desarrollar estas operaciones no se dispone de ninguna otra opción viable con la que ArcelorMittal Asturias pueda mitigar la merma económica que le provoca este drástico incremento de las tasas”.
El anuncio del grupo siderúrgico ha vuelto a poner a las factorías de la región en riesgo de deslocalización. La voz de alarma la había lanzado el presidente de la Federación Asturiana de Empresarios, Severino García Vigón, que adelantó las inquietudes que le transmitieron cualificados representantes de la multinacional antes de conocerse el comunicado de ArcelorMittal.
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