Mirar sin ver  | 

Asesores

Las personas que nos administran, en estos momentos, invierten más tiempo en el “y tú más” que en ayudar a los ingenuos que los hemos puestos en sus sillones

A estas alturas de la carrera y más de dos semanas después de la devastación más importante que ha sufrido la provincia de Valencia, desde que mi cabeza recuerda, me quita el sueño y me invaden las lágrimas por las personas que han perdido “sus” personas y después por las que han perdido “sus” cosas.

Ya en mi cuenta de LinkedIn, me confesé en contra de mi profunda introversión personal, como me sentía y que más podía hacer para ayudar a los que están ayudando a las familias que tanto dolor y sufrimiento les ha llegado, sin pedirlo ni merecerlo. Luego están las empresas de las zonas en las que trabajan los ciudadanos locales, que están vinculadas con la logística nacional y la internacional.

El mar es el medio de transporte habitual de alrededor del 90% del comercio mundial y con él, los contenedores. Contenedores sujetos a ocupaciones en los puertos y demoras en la no devolución de los mismos (vacíos) en el tiempo contratado. Infinitas gracias, de corazón, a los transportistas, porque su gran mayoría son de la “terreta” y lo entienden al trabajar sin ánimo de lucro por estas causas. Y a las grandes navieras que dominan el mundo, ya que estoy seguro de que mirarán hacia el cielo antes de debitar gastos por demoras.

Y eso nos lleva a las personas que nos administran y que en estos momentos invierten más tiempo en el “y tú más” que en ayudar a los ingenuos que los hemos puesto en sus sillones, con un pequeño papel en una ranura. Como empleados de los ciudadanos españoles, les exijo que en lugar de nombrar asesores por agradecimiento, lo hagan porque son personas de reconocido prestigio profesional contrastado e impoluto historial de cumplimento con la honestidad, aunque apenas les conozcan y, por tanto, no confíen en ellas, garantizándoles que con esas virtudes muy difícil será que defrauden su confianza. Y para la desgracia que vive el pueblo valenciano, de su perfil en el sector logístico portuario, hay unos cuantos candidatos. “Para confiar, confía” (Ernest Hemingway).

Miguel Rocher

mrocher@operinter.com