Autonomías y diputaciones limitan al sector en su actividad al no existir normas comunes.
La patronal Astrae denuncia “el reino de taifas” que vienen padeciendo las empresas de transportes especiales en España. Distintas comunidades autónomas y diputaciones, que son titulares de carreteras, están limitando la actividad del sector al no haberse establecido unas normas comunes en todo el territorio nacional
”Que una autonomía o una diputación pueda limitar la actividad de todo un sector de esta manera es impensable”, lamentó el presidente de Astrae, Juan Gatnau, en el marco de la asamblea de la patronal de las empresas de transportes especiales que tuvo lugar recientemente en Madrid. Mientras que la Administración central cuenta con un informe genérico para vías, itinerarios y dimensiones, lo que facilita la obtención de autorizaciones para la realización de transportes especiales, gran parte de autonomías y diputaciones carecen del mismo. De hecho, “el 50 por ciento de las comunidades autónomas no tienen estos informes genéricos y las diputaciones prácticamente ninguna”, reconoció María Anuncia Ocampo, jefa de Área de Autorizaciones Especiales de Circulación de la Dirección General de Tráfico (DGT). Ocampo señaló que “desde la DGT hacemos fuerza para que todos los titulares de vías en España emitan estos informes genéricos”.
Sin embargo, esto no parece ser suficiente porque la situación está enquistada, sin ningún tipo de avance después de décadas de padecimiento para el sector. Por eso, Gatnau insistió en que la Administración central reconozca “el reino de taifas” que padecen las empresas transportistas, lo que se convierte en “un problema de fondo que afecta a los cargadores y a la economía española en general”. El presidente de Astrae lamentó que para la DGT sea equiparable “el hecho de no haber obtenido una autorización por defecto de forma con los que actúan ilegalmente”, como está sucediendo.
Además, se quejó del agravio comparativo que supone que en otros ámbitos del transporte, como en los portavehículos, no se inmovilicen los camiones por excesos de altura, mientras que en los transportes especiales se aplica de manera inmediata esta inmovilización con un exceso de cinco centímetros en la anchura “al llevar una autorización complementario de circulación, que otros ni siquiera llevan”, aseguró Gatnau. El número de autorizaciones complementarias de circulación para transportes especiales emitidos por la DGT se situó en 35.929 en 2013, lo que supuso un nuevo descenso interanual del 5 por ciento, según explicó María Anuncia Ocampo. Lejos queda la cifra récord registrada en el año 2009, cuando se superaron las 65.000 autorizaciones.