El presidente de la patronal de transporte frigorífico, José María Arnedo, asegura que “es fundamental que se armonice en el ámbito europeo la prohibición de la carga y descarga” por parte de los conductores, incluyendo el intercambio de palés.
La Asociación Española de Empresarios de Transportes Bajo Temperatura Dirigida (Atfrie), que preside José María Arnedo, mira a Europa para que la prohibición de la carga y descarga por parte de los conductores, incluyendo el intercambio de palés, deje de ser la ‘excepción ibérica’. “Es fundamental que se armonice en el ámbito europeo la nueva norma que se ha aprobado en España. Debemos ir en esa dirección cuanto antes. Los clientes están receptivos, pero todavía supone un punto de fricción”. Así de contundente se mostró Arnedo en el marco de la Asamblea General de la organización, celebrada los días 15 y 16 de septiembre en Oviedo bajo el lema ‘Por la dignidad del sector, hacia un futuro económico y socialmente sostenible’.
La patronal Atfrie se alinea así con la posición de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic), que ha vuelto a instar a la IRU que promueva en Bruselas la implantación de esta medida, apoyándose en los avances legislativos portugués y español, únicos países de la UE en los que se contempla esta norma.
Precisamente, hoy está previsto un encuentro en Madrid con los sindicatos europeos, en el que participarán representantes de Astic y Atfrie, con el objetivo de ir sentando las bases de una propuesta normativa que lo avale ante las instituciones europeas. “Queda un arduo trabajo en Europa para extender todos los logros que hemos conseguido en España, para que no se den situaciones de conflictividad en cuanto a los derechos de los transportistas por el mero hecho de cruzar los Pirineos”, advirtió Antonio López, asesor jurídico de Atfrie.
Sin duda, no será un camino de rosas, sobre todo teniendo en cuenta la posición de las principales organizaciones sindicales españolas, muy críticas con la nueva norma y molestas por su no invitación a participar en las negociaciones entre el Comité Nacional y el Ministerio de Transportes, como se puso de manifiesto en la mesa redonda sectorial organizada por la patronal de transporte frigorífico.
Francisco Vega, representante de CCOO, aseguró que “la prohibición de la carga y descarga en España es un avance”, pero recordó que “la norma está llena de ambigüedad”. Con todo, se mostró partidario de empujar esta medida. Eso sí, “superando lo que se ha trabajado en España”, tras reiterar que “el diálogo social tripartito tiene que ser una realidad”. En cuanto a dignificar la profesión y hacerla más atractiva, Vega apuntó que “queda mucho trabajo por hacer”. En un escenario donde la falta de conductores constituye uno de los principales problemas del sector, destacó, entre otros aspectos, la necesidad de “mejorar las condiciones laborales de los transportistas, la formación y las áreas de servicio”.
En la misma línea se pronunció Diego Buenestado, de UGT, que insistió en disponer de una “norma clara” antes de proponer su extensión en Europa, tras manifestar que la nueva norma española genera “muchas dudas”.
El director técnico de Astic y vicepresidente de la Comisión de Asuntos Sociales de la IRU, José Manuel Pardo, también participó en la mesa de debate. Pardo avanzó a los empresarios asistentes que la organización internacional IRU adoptará una decisión una vez que haya analizado la aplicación y el efecto que ha tenido esta norma en España y Portugal. “La pelota esta en nuestro tejado. Tenemos que trasladar las ventajas”, apuntó el representante de Astic, en clara alusión a que la norma hace más atractiva la profesión y aumenta la productividad, al ganar horas que actualmente están penalizadas por otros trabajos. Por último, recordó que, “por el momento, Francia y Alemania se muestran abiertas a implantarlo, mientras países nórdicos, como Dinamarca, Finlandia y Suecia, han hecho patente su rechazo”.
El vicepresidente de Atfrie, Pedro Conejero, también señaló que “la prohibición de la carga y descarga va a ser un revulsivo para atraer a gente a la profesión”. Conejero recordó que “la profesión de conductor se ha deteriorado de tal manera que ahora tenemos un problema de relevo generacional. Estamos en la sociedad de la conciliación de las condiciones laborales y familiares y en el transporte internacional esto no encaja”. Por ello, abogó, de forma enérgica, por “avanzar con los que tenemos, y luego ya se podrá aquilatar, porque si no, dentro de un año seguiremos hablando del tema”.
Por último, Ovidio de la Roza, presidente de CETM, recordó los avances “históricos” que ha logrado el sector en el último año, de la mano del Comité Nacional, “más unido que nunca”, y confesó que le está “sorprendiendo favorablemente como la prohibición de la carga y descarga se está introduciendo en el sector”, pese a que “lleva poco tiempo y hay mucha casuística”.
“El futuro es positivo”
La clausura de la Asamblea General de Atfrie corrió a cargo de Jaime Moreno, director general de Transporte Terrestre del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), que se mostró confiado de que “el futuro es positivo”. En este sentido, puso en valor los acuerdos alcanzados con el Comité Nacional, con “medidas históricas” que reclamaba el sector, como la carga y descarga, “un hito importante”, si bien reconoció que “todavía hay zonas grises que tenemos que aclarar”. El representante del Ministerio avanzó que “trabajaremos codo con codo con el Comité y los sindicatos para aprovechar al máximo esta medida que acaba de entrar en vigor y, como cualquier norma, tiene que echar a andar”. Eso sí, confesó que “esto no se acaba” y adelantó, por ejemplo, la modificación de los pesos y dimensiones de los camiones, de forma “pactada con el Comité para que sea positivo para el sector” y alineados con la sostenibilidad. “El sector tiene que ser competitivo”, concluyó.
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