La delicada situación por la que atraviesa la economía española ha encontrado una de sus principales válvulas de escape en el sector exportador y para que esta tendencia se acelere, en el contexto de globalización en el que nos hemos instalado definitivamente, cada vez va a resultar más importante el desarrollo e impulso de la carga aérea.
Y es en este punto donde chocamos con la cruda realidad que nos indica que los vuelos con aviones cargueros en el principal aeropuerto español en cuanto a tráfico de mercancías, el de Madrid-Barajas, vienen a representar apenas el 4 por ciento sobre un total dominado con rotundidad por el cargo movido por aviones de pasajeros. La cifra es ridícula si la comparamos con el 46 por ciento de media en Europa que alcanza el volumen de carga transportado por aeronaves cargueras.
Y si establecemos la comparación exclusivamente con los principales aeropuertos hub en el contexto europeo, es decir, los competidores directos de Barajas, el resultado no es muy diferente, ya que en los Franfurt, París-Charles de Gaulle, Ámsterdam-Schiphol y Londres- Heathrow la media de mercancía que se mueve por carguero es del 43 por ciento.
Por eso, los expertos del Foro Madcargo tienen claro que si queremos que Barajas compita en la programación de vuelos cargueros debe empezar por reducir las tasas que les aplica, puesto que si no será imposible atraer esos tráficos ya que los hubs europeos han apostado por una política de ajuste a la baja de sus tasas en el marco de un entorno cada vez más competitivo, en el que incluso algunos aeropuertos como los de París o Ámsterdam llegan a aplicar bonificaciones a los cargueros.