El puerto ha necesitado 33 millones de toneladas de escollera, 501 millones de euros de inversión y más de seis años de trabajo.
El puerto de Barcelona ya cuenta con los dos nuevos diques de abrigo que resuelven sus problemas de espacio a 30 años vista. Se han dragado cuatro millones de metros cúbicos de tierra y se han necesitado 33 millones de toneladas de escollera y más de seis años de trabajo. La inversión tampoco ha sido pequeña, supera los 500 millones
A finales del pasado año acabaron las obras de ampliación del dique de abrigo este y unos meses antes la construcción del nuevo dique sur, infraestructuras que garantizan al puerto de Barcelona no tener problemas de espacio en los próximos 30 años. Los diques de abrigo permiten “la ampliación más grande que acomete el puerto de Barcelona y, posiblemente, de las que se han llevado hasta la fecha en un puerto español”, asegura José Luis Estrada, comisionado para las obras de ampliación de la dársena. Las magnitudes de la obra marean: cuatro millones de metros cúbicos de tierra dragada, casi 33 millones de toneladas de escollera utilizada, así como unos 344 millones de metros cúbicos de hormigón y más de seis años de obras.
La inversión tampoco ha sido pequeña, 501,32 millones de euros, de los que la Unión Europea ha aportado el 53 por ciento y el resto la Autoridad Portuaria mediante recursos propios y deuda. La construcción de los diques de abrigo, para lo que se han empleado cajones de hormigón prefabricados y vertido de escollera, ha sido compleja técnicamente por el traicionero suelo deltaico sobre el que se asienta la lámina de agua. La faraónica obra permitirá, una vez construidos los muelles, multiplicar por 2,3 la superficie terrestre actual, pasando de las 558 a las 1.265 hectáreas, la superficie marítima, de las 374 a las 786 hectáreas y la línea de muelle, de los 19.766 a los 29.702 metros.
El nuevo dique sur, de una longitud de 4.800 metros en forma de “u”, arranca en la nueva desembocadura del río Llobregat y finaliza con un tramo en paralelo con su hermano, el dique este, formando ambos la nueva bocana. Con una inversión de 304,04 millones, el dique sur se realizó en dos fases. Su manto principal está constituido por bloques de hormigón de 40 y hasta 60 toneladas. La otra obra de abrigo está formada por un dique en talud de 2.024,37 metros de longitud. El manto principal lo integran bloques de hormigón de 50 toneladas en el tronco. En el morro y en el cambio de alineación los bloques son de 80 toneladas.
En este caso, la inversión ha ascendido a 197,28 millones de euros. Los dos diques de abrigo han corrido mejor suerte que el muelle Prat, la primera superficie ganada con la ampliación, y se han cumplido los plazos de entrega previstos. El muelle Prat, adjudicado al Hutchison- Tercat, tenía también que estar listo en 2008. Con el hundimiento parcial del muelle, el 1 de enero de 2007, la entrega de la obra se ha retrasado. De no haber más contratiempos, la nueva instalación estará operativa durante el primer trimestre de 2011.
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