La Autoridad Portuaria de Barcelona, que preside Sixte Cambra, mantendrá el próximo año las bonificaciones que empezó a aplicar en 2011. La dársena dejó de ingresar 14 millones de euros el año pasado por los descuentos a determinados tráficos (contenedores, vehículos nuevos, short sea shipping, frutas y cruceros) y por aplicar la cuantía básica de las tasas al buque y a la mercancía, de las que se benefician todos los tráficos.
Este año ha extendido las bonificaciones a las tasas de ocupación de las dos terminales de contenedores, TCB y Tercat, y de vehículos, Setram y Autoterminal, así como de la multipropósito Terminal Port Nou y de la que gestiona Trasmediterránea (Terminal Ferry de Barcelona). La cuantía de estos descuentos asciende a cinco millones de euros.
Las bonificaciones “se mantendrán para 2013 como mínimo”, ha señalado Sixte Cambra, presidente del puerto. Aunque los descuentos se notan en la cuenta de resultados -su cifra de negocio bajó el 5,4 por ciento el año pasado-, la Autoridad Portuaria mantiene esta estrategia en aras a incrementar tráficos y favorecer la competitividad de las empresas. A pesar de la caída de ingresos registrada el pasado año, Barcelona se mantuvo como primer puerto en ingresos (158 millones de euros), resultados (56 millones) y cash flow (78,3 millones).
Con una deuda de 486 millones de euros a 25 años, “tenemos un ratio de endeudamiento muy razonable, que nos permite abordar compromisos futuros de inversión”, añadió el responsable portuario. El plan de inversiones de este ejercicio asciende a 193 millones de euros.