El Depósito Franco ultima la apertura de una planta de frío tras remodelar la instalación de la antigua terminal de fruta del puerto.
El puerto de Bilbao abre la puerta al almacenaje de producto congelado para alimentación con la puesta en marcha de una planta de frío, cuya construcción corre a cargo del Depósito Franco, que ha remodelado la antigua terminal de fruta. Varios operadores económicos y grandes importadores han manifestado su interés por la instalación
El puerto de Bilbao dispondrá de una planta de frío, que abre la puerta al almacenaje de producto congelado para alimentación. El Depósito Franco de Bilbao ultima la puesta en marcha de esta nueva instalación, que podría estar operativa a principios del próximo mes de octubre, tras remodelar completamente la antigua terminal de fruta de la dársena vasca, ya que sus almacenes actuales estaban obsoletos. Según ha podido saber este periódico, varios operadores económicos y grandes importadores han manifestado ya al Consorcio su interés por la citada planta, que podrían utilizar como punto de reexpedición de productos perecederos al mercado europeo.
La instalación, que será gestionada por la nueva sociedad BAFT (Bilbao Atlántico Frío Terminal), ocupará una superficie de 4.455 metros cuadrados, distribuida en dos cámaras para productos congelados (-20ºC), con estanterías preparadas para la paletización compacta (Drive-in), que permite la máxima utilización del espacio disponible. Tienen una capacidad de almacenaje de 3.600 pallets y un volumen total de 15.130 metros cúbicos. Al mismo tiempo, la planta dispondrá de tres cámaras para productos refrigerados con una capacidad de almacenaje de 1.470 pallets y un volumen de 5.550 metros cúbicos.
La terminal de frío se sitúa en primera línea del muelle Reina Victoria del puerto de Bilbao y cuenta con una línea de atraque dedicada de 180 metros lineales. La obra civil y la construcción de cámaras y dependencias auxiliares corre a cargo de la ingeniería Infrisa, mientras que para la instalación de frío se ha contratado a la sociedad Johnson Controls Refrigeration. El presupuesto de la obra asciende a 4,1 millones de euros, financiados mediante recursos propios y créditos bancarios.
El Depósito Franco de Bilbao dispone de diez almacenes polivalentes con una superficie de 27.144 metros cuadrados, de los cuales 25.359 son cubiertos y 1.785 descubiertos. Además, existen dos instalaciones que también funcionan en régimen de depósito franco, aunque no pertenecen a la entidad, que son Deposa, con una superficie de 3.444 metros cuadrados destinada al almacenamiento de graneles líquidos alimentarios, y la ya citada terminal frutera BAFT, que ha sido remodelada. En 2007, el Depósito movió un total de 511.523 toneladas, lo que supuso un aumento del 14 por ciento.