Una filial de Bergé y Cía, a punto de dejar el servicio en abril por su escasa rentabilidad.
Boluda ha abierto una nueva mercantil en Alicante para encargarse del servicio de remolque del puerto. Con ello, la empresa valenciana logra operar el remolque en todos los puertos valencianos de interés general. La llegada de Boluda se produce tras que el puerto interviniera el servicio y casi rompiera el contrato con una filial de Bergé
Grupo Boluda ha constituido una nueva empresa en Alicante para encargarse del servicio del remolque del puerto. La nueva mercantil, que se denomina “Boluda Towage and Salvage Alicante”, fue constituida por el empresario valenciano Vicente Boluda Fos el pasado 10 de junio con un capital social de 3.006 euros. La firma inició su actividad el pasado 21 de julio con dos remolcadores en el puerto de Alicante, el “J. Torres” y el “Boluda Marí”, con una licencia provisional. La entrada de los remolcadores de Boluda en el puerto de Alicante supone que el grupo pasa a operar en exclusiva el servicio de remolque en los cinco puertos de interés general de la Comunidad Valenciana, es decir, Castellón, Sagunto, Valencia, Gandía y Alicante.
En este sentido, fuentes de la Autoridad Portuaria de Alicante han confirmado a TRANSPORTE XXI que “el pasado 30 de junio se aprobó el pliego de prescripciones particulares del servicio, Boluda ha pedido cubrir el servicio, mientras que el actual prestador, Realsa, no ha solicitado renovar su licencia que finalizaba el 15 de septiembre. La licencia definitiva la tiene que aprobar el consejo de administración”. El puerto señala que “la propuesta de Boluda mejora el servicio, manteniéndose los dos remolcadores y un tercero, de mayor potencia, si es necesario”.
La llegada de Boluda al remolque de Alicante se empezó a gestar el pasado mes de mayo cuando la Autoridad Portuaria, que preside Miguel Campoy, intervino el servicio prestado por Realsa e interpuso un expediente sancionador a la empresa tras retirar uno de los dos remolcadores que cubrían el servicio, ya que la filial de Bergé aducía que tuvo que reducir sus medios de remolque por la falta de rentabilidad que venía provocando altas pérdidas en la empresa.
El puerto aplicó el artículo 60 de la Ley de Puertos 48/2003 que faculta a las autoridades portuarias a “asumir la prestación del servicio cuando lo requieran las circunstancias, por ausencia o insuficiencia de iniciativa privada” y procedió a prestar el servicio con un remolcador de la Dirección General de la Marina Mercante hasta que consiguió que Realsa volviera a prestar el servicio con dos remolcadores. Durante 2009 el número total de barcos que escalaron en Alicante fue de 955 buques. De esta cifra 155 precisaron de un remolcador (16,4%), mientras que 66 buques utilizaron dos remolcadores (7%).
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