Bridgestone, el mayor fabricante mundial de neumáticos, confía en elevar sus beneficios en un 64 por ciento para 2012 gracias a la fortaleza de la demanda en los mercados emergentes, como China y Rusia. En concreto, espera alcanzar unos beneficios por cuenta de explotación de 4.000 millones de dólares y unos ingresos de 42.000 millones de dólares en 2012. Las expectativas para el año siguiente, 2013, son aún mejores.
Estas previsiones fueron hechas públicas por Shoshi Arakawa, director general ejecutivo de Bridgestone, en una rueda de prensa en Japón en la que manifestó también que “a medio o largo plazo, la demanda mundial de neumáticos será muy fuerte y esperamos que el crecimiento de las ventas de coches en los mercados de Brasil, Rusia, India y China se mantenga con la fortaleza que ahora tiene”. Sin embargo, la fortaleza del yen y el aumento de precios en las materias primas ha hecho a Bridgestone anunciar un descenso del 38 por ciento en sus beneficios de explotación para el presente ejercicio fiscal.
Como se sabe, Bridgestone Hispania, la filial española del gigante japonés, ha anunciado 2.800 despidos temporales en tres de sus fábricas, para ajustar la producción a los niveles de demanda de automóviles en toda Europa, los cuales han experimentado una fuerte contracción en los últimos meses, afectando tanto a turismos como a vehículos industriales. El ERE planteado contempla la suspensión de actividad durante 16 días, que se repartirán entre noviembre y diciembre de este año, en las plantas de Basauri (Vizcaya) y Burgos, y de 13 días en la planta de Usansolo (Vizcaya). Las instalaciones cántabras de San Miguel no se verán afectadas.