Contarsa, la única terminal de contenedores del puerto de Tarragona, manipuló 47.049 TEUs en 2007, un 285,6 por ciento más que en 2006. Estos resultados han sido posibles gracias a la consolidación de los tráficos ya existentes y a la captación de nuevas líneas: una de JSV Logistic, que ya tenía dos desde el puerto catalán, con el sur de España y la feeder de Maersk con Italia, que también cuenta con otras dos, una estacional con Brasil y otra feeder con Algeciras, así como la que puso en marcha a mediados de año Trasatlántica. No obstante, el tráfico de contenedores, por su volumen, “sigue siendo una asignatura pendiente y, en el futuro, es por donde debemos crecer”, aseguró Josep Anton Burgasé, presidente del puerto de Tarragona. Para el responsable portuario, “Contarsa ha hecho un esfuerzo importante.
No se puede pedir más”. Burgasé aboga por el desembarco de un terminalista global en el puerto, y hay tres que han mostrado interés: Hutchison, PSA y Dubai Port World. Ello unido a que dos terminales de contenedores son demasiadas para el mercado de Tarragona, “y se harían una competencia que podría acabar siendo perjudicial”, apunta Burgasé, la solución podría ser una alianza de Contarsa “con un operador global, lo que permitiría dar un salto cualitativo y cuantitativo” en el tráfico de contenedores.
Ésta es “sólo una posibilidad”, puntualiza Burgasé. El futuro de Contarsa, si opta por continuar en solitario, “no está hipotecado si tuviera que crecer, ya que estamos en condiciones de facilitar ese crecimiento”. El traslado de las terminales de vehículos que ocupan el muelle de Andalucía a la ampliación del de Cantabria liberará un espacio de 24 hectáreas que el puerto prevé destinar exclusivamente a contenedores. Tarragona ha movido un total de 36,28 millones de toneladas de mercancías en 2007, un 14,3 por ciento más que en 2006. “Es el crecimiento más importante de entre los diez primeros puertos españoles”.
Y ello ha sido posible por el “dinamismo económico” de la provincia de Tarragona y del hinterland de la instalación, así como por la “fortaleza de las empresas del puerto”. De cara a 2008, “dependerá del comportamiento de la economía, manejamos cierto crecimiento vegetativo”, añadió Burgasé. Los ingresos de explotación han ascendido a 58,3 millones de euros, un 16,6 por ciento más, y ello aunque “las tasas al barco y a la mercancía aumentaron un 2 por ciento en 2007, por debajo del IPC”.