A Cabify no le ha parecido disuasorio que la mitad de la flota de transporte de mercancías esté cogiendo polvo por falta de actividad
La Comunidad de Madrid ha requerido a Cabify para que deje de prestar y publicitar su nuevo servicio de envíos y le ha advertido de posibles sanciones. Parece que la amenaza no ha tenido mucho éxito, al menos inicialmente, según se denuncia desde el sector.
La “brillante” idea de la multinacional del sector de los viajeros para “echar una mano” en tiempos de coronavirus ha sido la apuesta por poner su flota de coches a repartir paquetería en sus maleteros. A Cabify no le ha parecido disuasoria ni la amenaza de la Administración regional ni que la mitad de la flota de transporte de mercancías de Madrid esté ahora mismo cogiendo polvo en sus campas por falta de actividad por culpa de la pandemia.
Siendo mal pensados, este servicio puntual podría cumplir perfectamente el papel de “piloto” para testear el mercado. Si la cosa funciona, si se cumplen los parámetros marcados, se tira adelante y que salga el sol por Antequera. Ya lo demostraron en el caso de los viajeros y las mercancías pueden suponer otra pica en Flandes.
La maniobra de Cabify sigue los pasos de la que puso en marcha en su día Amazon, con un servicio muy similar, utilizando los maleteros de los coches de particulares para repartir paquetería en la capital.
El sector ya ha denunciado que estas prácticas representan una clara competencia desleal. Por un lado incumplen flagrantemente la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT), como les ha advertido la propia Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid. Pero es que, además, puede que incumplan también las normativas laboral y de Seguridad Vial, por lo que pasarían a estar bajo el foco del Minsiterio de Trabajo, a través de la Inspección de Trabajo y de la Seguridad Social, así como de la Dirección General de Tráfico.
Hay inventos que revolucionan la sociedad, otros que vienen a aportar algo, pero lo que no tiene sentido es inventar lo ya inventado buscando atajos.