Directivos de Carreras Grupo Logístico, Adam Foods y Condis Supermercados expusieron los cambios organizativos, operativos y de prevención para mantener sus redes de aprovisionamiento y distribución sin rupturas, en un encuentro celebrado en Barcelona New Economy Week (BNEW).
Héctor Benito, director de consultoría de Carreras Grupo Logístico, Cesc Mustienes, director de logística de Adam Foods y Víctor Escanciano, director de logística y sistemas de información en Condis Supermercados, han mostrado las transformaciones desarrolladas por sus compañías para mantener un servicio just in time y sin rupturas de la cadena de suministro durante la pandemia, en un encuentro desarrollado en la primera edición de Barcelona New Economy Week (BNEW).
El responsable de Carreras Grupo Logístico ha explicado que en su cartera de clientes atiende a sectores declarados estratégicos durante esta crisis sanitaria como la alimentación o el energético, entre otras industrias.
Héctor Benito aseguró que “desde la declaración del estado de alarma, se modificó la organización, la operativa y el sistema de prevención con el objetivo prioritario de mantener la cadena de suministro sin interrupciones”.
El operador logístico de cuarta generación puso en marcha un comité de crisis que comunicó los cambios organizativos en la gestión de los centros logísticos para adaptarse a la nueva situación creada por la COVID-19, que hasta entonces no se había planteado. Entre otras medidas, ampliaron los recursos humanos y medios para atender los fuertes crecimientos de demanda para la gran distribución o el comercio electrónico.
Héctor Benito señaló que “la prevención se situó como un aspecto clave para dar los mayores niveles de seguridad en la salud de los empleados, cumplir con todas las normativas y evitar la propagación del coronavirus en la plantilla”. Para ello, se crearon equipos operativos más reducidos para funcionar como pequeñas burbujas y se impulsó el teletrabajo. “La empresa estaba muy preparada para trabajar en remoto a pesar del aumento del volumen de información”, explicó.
En la operativa, el directivo destacó que “fue clave gestionar las capacidades que teníamos en todo momento. Se cuantificaba los recursos disponibles de personal, flota, equipos, al tiempo que se diseñaban planes alternativos para responder a las situaciones de mayor actividad con los medios extra a los que se podría recurrir”, apuntó.
El grupo logístico reforzó la coordinación con los fabricantes y clientes para establecer las prioridades y planificar cualquier cambio que se precisara con el fin de evitar colapsos. Asimismo, se intentaba prever qué demandas se iban a necesitar durante los siguientes días. “Además, la pandemia ha acelerado procesos de digitalización con algunos clientes que empleaban albaranes y otros trámites administrativos en papel”, aseguró Benito.
Por último, señaló que “aunque la cadena de suministro ha operado sin rupturas, a pesar de la fuerte presión a la que ha sido sometida durante la pandemia, habría que replantearse el modelo de stock actual, basado en plataformas centralizadas cada vez más grandes”. A su juicio, este sistema organizativo puede penalizar el reaprovisionamiento a menor escala que requieren algunos clientes.
Por su partte, Cesc Mustienes, director de logística de Adam Foods, señaló que la multinacional ya había recibido señales desde finales de diciembre sobre una nueva situación que requeriría de planes de contingencia. El grupo de alimentación incrementó sus volúmenes de aprovisionamiento de materias primas para preparar a sus fábricas ante las posibles dificultades de recibir futuros suministros.
Mustienes consideró que “la pandemia ha puesto a las cadenas de suministro al límite. Sin embargo, aunque ha habido muchas tensiones la situación se ha salvado porque es un sector con una capacidad de reacción brutal”. A su juicio, “estamos acostumbrados a trabajar con estrés pero esta tensión sostenida no es buena, y además penaliza la rentabilidad de las empresas”.
Para futuras situaciones críticas, el director de logística de Adam Foods defendió “disponer de planes de contingencia b, c y d, así como ampliar los colchones de seguridad”.
Víctor Escanciano, director de logística y sistemas de información en Condis Supermercados, también incidió en que “la colaboración con los fabricantes y distribuidores ha sido fundamental durante la pandemia para no colapsar la cadena de suministro”.
El responsable de la cadena de distribución reveló que el comercio electrónico para el sector de la alimentación, hasta la llegada de la pandemia, “tenía un crecimiento muy contenido. Con esta crisis sanitaria, los pedidos online han explotado con alzas que triplicaban los volúmenes anteriores. Además, una gran parte de los nuevos clientes digitales se han fidelizado al canal electrónico.
Victor Escanciano destacó que este despegue de las ventas online obligó a “incorporar nuevos recursos humanos, dotarles de formación, así como acometer inversiones en equipamientos. En este ámbito, Condis Supermercados transformó un establecimiento como centro logístico para las compras en Internet destinadas al área sur de Barcelona”.
Escanciano también defendió “replantear el modelo de stock, identificando por ejemplo los artículos de importación transportados en modo marítimo para ampliar sus volúmenes de almacenamiento, y evitar situaciones de ruptura de la cadena de suministro, que en nuestro caso puede suponer la pérdida de clientes”.