El servicio, que está previsto que comience a operar en 2009, permitirá sacar de la carretera a 1.250 camiones anualmente.
Cererail ultima los detalles para poner en marcha un nuevo tráfico de harina de soja procedente de Lisboa y que tendrá como destino el centro peninsular. Este nuevo servicio, que está previsto que comience a operar a lo largo del presente ejercicio, permitirá sacar, de forma inicial, de la carretera a 1.250 camiones cada año
El pool de vagones Cererail, con forma jurídica de agrupación de interes económico, ultima un acuerdo por el que se encargará de gestionar el tráfico de harina de soja por vía ferrocarril procedente de Lisboa y con destino al centro peninsular. El tráfico comenzará a funcionar en los próximos meses y permitirá sacar de la carretera a 1.250 camiones de manera anual y según las previsiones iniciales. Este es uno de los dos proyectos que maneja para el presente año Cererail, según ha apuntado a este periódico el director general de la compañía, Santiago Muñoz. El otro proyecto para 2009 de la compañía del sector ferroviario pasa por el inicio de un nuevo tráfico desde una nueva factoría de un fabricante de harinas en la provincia de Huesca.
Este nuevo tráfico está todavía a expensas de que se apruebe la apertura de una estación actualmente cerrada al tráfico de mercancías y que se encuentra ubicada al lado de las instalaciones de la harinera. Actualmente, se están llevando a cabo contactos por parte del fabricante con responsables del Ministerio de Fomento y del Adif para que esta terminal oscense se vuelva a convertir en operativa. El fabricante cuenta con el apoyo de Renfe y de Cererail. De conseguirse ejecutar el mencionado proyecto, se podría generar un tráfico de 100.000 toneladas anuales de trigo, materia prima de la que se surte la citada factoría.
Por otro lado, los tráficos de Cererail se mantuvieron estables durante el pasado año, con un movimiento total de 950.000 toneladas, frente a las 900.000 registradas en el año anterior. Aún así, “se registró un descenso del 5 por ciento sobre nuestras previsiones iniciales”, asegura Muñoz. Este descenso se concentró en los clientes de pequeño tamaño, que demandan unos tráficos de carácter más coyuntural y que han preferido en algunos casos optar por el transporte por carretera “al haberse producido un descenso sustancial de los precios del mismo en los últimos meses”.
Balance positivo Pero estos descensos también se han compensado con el incremento de la demanda de tráfico de los clientes más importantes en tamaño. Por lo que, en conjunto, y pese a que “la crisis está afectando en alguna medida, el balance del año pasado y lo que llevamos de éste está siendo relativamente bueno, puesto que la mayor parte de nuestros clientes habituales no han reducido su demanda de transporte, al tratarse de fabricantes de productos del sector agroalimentario”, concreta Muñoz. Cererail cuenta entre sus clientes con empresas del sector primario alimentario, que no han visto resentida tanto su demanda como en otros sectores. Por este motivo, Cererail prevé mantener en 2009 la cifra de movimientos alcanzada el pasado año.
Por otro lado y en relación con la política del Ministerio de Fomento en materia de transporte de mercancías por ferrocarril, Santiago Muñoz se manifiesta “muy escéptico, puesto que se está acometiendo una inversión millonaria en material de tracción para mercancías que se va a quedar parado si no se consiguen abrir nuevos mercados”. Cererail mantiene como único operador de tracción de sus vagones a Renfe, ya que “hemos mantenido contactos con empresas con locomotoras, pero las ofertas que nos han facilitado no son competitivas, ya que no ofrecen mejores precios que los que ofrece la pública. No son alternativa real, hoy por hoy”.
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