Los gobiernos de Chequia y Eslovaquia han decidido fusionar sus compañías nacionales de transporte ferroviario de mercancías. La checa (CD Cargo) es la quinta compañía de Europa, con 90 millones de toneladas de volumen transportado en 2007.
Los eslovacos por su parte movieron 50 millones de toneladas, lo que les convierte en el décimo operador de Europa. Juntas, ambas compañías atesoran el potencial de controlar los tráficos ferroviarios entre el Este y el Oeste de Europa. La nueva empresa estará a la altura de la polaca PKP Cargo, segundo operador europeo tras DB Cargo.