Los fabricantes chinos ya construían en 2009 más del 50% de los vehículos industriales de tonelaje medio y pesado tras lograr un avance del 22% con respecto al año anterior.
La reciente visita a España de Li Keqiang, viceprimer ministro chino, y la importancia que el Ejecutivo de Zapatero dio a la misma pueden entenderse mejor cuando se conocen algunos detalles. Por ejemplo, el papel del país asiático en la industria fabricante de camiones, que podría aportar más de la mitad de la producción mundial en 2014
Durante la pasada -para algunoscrisis económica y financiera, los fabricantes occidentales de camiones fueron una de las industrias que más se resintieron de los problemas, con fuertes pérdidas financieras que les obligaron a recortes salvajes de producción y plantilla. Por el contrario, favorecidos en parte por los programas de ayudas orientados a impulsar el crecimiento de la economía de su país que puso en marcha el gobierno chino, los fabricantes de camiones de este gigantesco país asiático fueron los únicos que, en su conjunto, consiguieron elevar su producción.
Alix Partners, una consultora norteamericana, cifra en un 22 por ciento el avance de la producción china de camiones en 2009 respecto al año previo y estima que en 2010 ha proseguido ese avance pues sólo en el primer semestre de 2010 ya se había incrementado un 76 por ciento la producción de camiones. Es más, 2010 podría ser el primer año en que los fabricantes chinos rebasen el millón de camiones. Esa evolución tan acelerada había permitido a China alcanzar una aportación del 49 por ciento a la producción mundial de camiones durante 2009 cuando en 2006 su presencia en este segmento industrial era de sólo un 20 por ciento.
Ahora bien, no vamos a caer ingenuamente en una interpretación simplona de estos porcentajes. Está claro que el avance logrado por los constructores chinos en 2009 se produjo en gran medida por la terrible contracción de la actividad de los fabricantes occidentales, que en ese año vieron como la producción de camiones de muchos de ellos se reducía a la mitad de 2008.
Obviamente, la recuperación que han vivido en 2010 los fabricantes occidentales va a frenar el crecimiento de la aportación porcentual china a la producción mundial de estos vehículos, dado que esa recuperación se edifica fundamentalmente sobre el crecimiento de la demanda de transporte en Norteamérica y algunos mercados de la Europa central y del norte y los camiones chinos no pueden beneficiarse de esa recuperación ya que sus vehículos, al no cumplir con las normas sobre limitación de emisiones contaminantes, no pueden optar a una parte de esa demanda recuperada.
Donde sí van a crecer los fabricantes chinos es en los mercados emergentes -que Alix Partners estima que generarán el 58 por ciento del aumento de las ventas de estos vehículos para 2014- ya que en ellos sí pueden aspirar a una cuota de mercado con sus vehículos de altos niveles de emisiones pero de bajo precio. Para Alix Partners, la exportación de camiones chinos, destinada en su mayor parte a los mercados emergentes de África y el sudeste asiático, ascendía a 134.000 unidades en la primera mitad de 2010, lo que representa un crecimiento del 25 por ciento respecto al mismo período de 2009.
Las sociedades conjuntas establecidas por los fabricantes occidentales de camiones con sus colegas chinos, como la de MAN con Sinotruck, van a permitir a los primeros ir haciéndose con una cuota mayor de las ventas de camiones en China, pero sus socios chinos también se aprovecharán de la mayor tecnología de sus socios occidentales para acceder a mercados que hasta ese momento les habían estado vedados.
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