El servicio, cubierto con buques de 1.700 TEUs, distribuirá carga transoceánica a los puertos de Valencia, Génova y Nápoles.
China Shipping ha creado una línea feeder, con base en Barcelona, para distribuir su carga transoceánica en Valencia, Génova y Nápoles. La naviera la ha puesto en marcha al sustituir un servicio entre Extremo Oriente y el Mediterráneo, que escalaba en los cuatro puertos, por otro que únicamente opera en esta zona en Barcelona
China Shipping ha puesto en marcha un servicio propio feeder, con base en el puerto de Barcelona, para distribuir su carga transoceánica en el Mediterráneo occidental, en los puertos de Valencia, Génova y Nápoles. La naviera ha creado esta línea al suprimir el servicio entre Extremo Oriente y el Mediterráneo AMX-1, que escalaba en los cuatro puertos, y sustituirlo por el AEX-1, que opera en la zona del Mediterráneo occidental únicamente en Barcelona, ambos de periodicidad semanal. La línea feeder es cubierta por portacontenedores con capacidad para 1.700 TEUs. El AMX-1, que la china hacia en alianza con la iraní IRISL, enlazaba exclusivamente Extremo Oriente con el Mediterráneo, mientras que el AEX-1, un viejo conocido en Barcelona, conecta, además, con los puertos del norte de Europa.
Cambiar de un servicio a otro supone pasar de portacontenedores de 5.500 a 9.600 TEUs. No obstante, la capacidad para el Mediterráneo es la misma “ya que antes teníamos todo el espacio para el Mediterráneo y ahora los portacontenedores llegan con la mitad de la carga para el norte de Europa”, señalaron fuentes de la naviera en Barcelona. El primer buque de 9.600 TEUs, el “CSCL Long Beach”, operó el pasado 17 de enero en las instalaciones de Terminal de Contenidors de Barcelona (TCB). Se trata de un portacontenedor nuevo, con bandera de Hong Kong, construido en 2007. En el puerto de Barcelona se hicieron 2.204 movimientos -1.324 de descarga y 880 de carga-. El AEX-1 se estrenó con una periodicidad puntual de cada quince días, “por la caída de la demanda de transporte, pero esperamos establecer la frecuencia semanal próximamente”.
China Shipping cerró 2008 en la Península con un 2,3 por ciento menos de tráfico -incluidos los contenedores vacíos- que en 2007, hasta los 165.500 TEUs. Este resultado se aleja del crecimiento de entre el 8 y el 10 por ciento que manejaba la naviera a principios de 2008. No obstante, sin contar los vacíos, que cayeron el 29,9 por ciento (37.150 TEUs), saldó el año con un avance del 10,2 por ciento (128.350 TEUs). Y este resultado se debió a la evolución de las exportaciones, que crecieron el 34,9 por ciento (25.700 TEUs) y de los transbordos, con un 14,5 por ciento más (53.150 TEUs). En cambio, las importaciones retrocedieron el 2,9 por ciento.