Cilsa inicia las obras de la plataforma de Toulouse a principios de este año

Barcelona tendrá su primera terminal marítima interior foránea.

Cilsa, la sociedad que gestiona la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) del puerto de Barcelona y donde la Autoridad Portuaria es el socio mayoritario, iniciará durante el primer trimestre de 2008 la construcción de la plataforma logística de Toulouse (Francia), que incluirá una terminal marítima interior como TMZ (Terminal Marítima Zaragoza). Esta iniciativa responde al plan estratégico del puerto catalán de ampliar su hinterland a través de este tipo de instalaciones e incluirá, a más largo plazo, dos plataformas más en el sur de Francia. Para Barcelona, “el entorno de Lyon es la hipotética frontera donde los costes logísticos y de tiempo son equivalentes a los del norte de Europa. Más arriba, el puerto deja de ser competitivo respecto al norte europeo”, según señalaron fuentes de Cilsa.

Toulouse será la primera plataforma que promueve Cilsa tras la ZAL y la primera vez que la Autoridad Portuaria impulsa fuera de nuestras fronteras un puerto seco. El proyecto se desarrollará en una superficie de 20 hectáreas, de las que tres se destinarán a la terminal marítima, que se denominará TMT (Terminal Marítima Toulouse), y el resto a naves logísticas. Tanto la terminal como las futuras naves contarán con ramales ferroviarios. TMT, que incluirá un depósito de reparación de contenedores, será gestionada por un operador privado, para lo que el puerto busca actualmente un socio.

En cuanto a la plataforma logística, se desarrollará en dos fases. La primera, de 10 hectáreas, consistirá en la construcción de 48.000 metros cuadrados de naves con una superficie de entre 4.500 y 6.000 metros cuadrados. Como en la ZAL de Barcelona, los recintos serán de alquiler y los operadores logísticos tendrán que mover parte de su tráfico por vía marítima, aunque no se exigirá una cuota tan alta como en la ZAL (30 por ciento del tráfico). Además, habrá 15.453 metros cuadrados de patios para maniobras y 21.800 de viales. La segunda fase, de siete hectáreas, incluirá naves más pequeñas, de entre 2.000 y 4.000 metros cuadrados, destinadas a operadores logísticos locales. La inversión prevista rondará los 50 millones de euros y, de cumplirse las previsiones, todo estará en marcha en 2009.

Además de Toulouse, Barcelona contará con una segunda plataforma en Perpiñán, donde el puerto se ha hecho con una reserva de suelo de 29 hectáreas. La tercera se situará en las inmediaciones de Lyon y está pendiente de decidir su emplazamiento definitivo entre dos posibles ubicaciones. Barcelona no sólo mira al sur de Francia. Para ampliar su hinterland, Cilsa proyecta implantarse en Marruecos de la mano de socios locales, para lo que ya ha iniciado negociaciones. Cilsa está participada en un 51 por ciento por el puerto de Barcelona, en un 32 por ciento por Abertis Logística y el 17 por ciento restante está en manos de Sepes (Entidad Pública Empresarial del Suelo). Actualmente, la sociedad comercializa la segunda fase de la ZAL, conocida como ZAL-Prat, que cuenta con una superficie de 143 hectáreas.