Quedan 126.000 m2 por comercializar en la instalación, que acoge a 120 empresas.
Clasa ha culminado la nueva terminal de carga del aeropuerto de Barcelona con la finalización de las obras de urbanización de la tercera fase, un proyecto que inició en 1998. Las instalaciones suman un total de 471.000 metros cuadrados y han supuesto una inversión de 46,5 millones de euros, por parte de la filial de Aena, a los que se suman, hasta la fecha, otros 10,5 millones de euros de inversión privada.
La terminal de carga podría crecer todavía más, ocho hectáreas, actuación que no está programada porque, primero, es necesario eliminar las vías del tren que atraviesan la plataforma aeroportuaria. La tercera fase cuenta con 104.000 metros cuadrados de superficie, en cuyas obras de urbanización se han invertido 11,3 millones de euros.
Los primeros inquilinos de la nueva superficie serán Transportes Azkar y el operador de handling Flightcare, que ya opera en la terminal y que contará con nuevas instalaciones, como ya avanzó este periódico en una anterior edición. Transportes Azkar ocupará una parcela de 26.448 metros cuadrados en tercera línea. Flightcare se ubicará en un terreno de 14.700 metros cuadrados de primera línea.
Quedan por comercializar 62.000 metros cuadrados de esta tercera fase. La primera fase, de 183.000 metros cuadrados, está completamente ocupada, mientras que en la segunda (128.000 metros cuadrados) está disponible el 50 por ciento de la superficie. En total, 120 empresas están instaladas en la terminal de carga, incluyendo los operadores que ocupan oficinas en el edificio de servicios generales. Ni Clasa ni el resto de filiales de Aena están incluidas en el plan de privatización aeroportuaria, aseguró Isaías Táboas, secretario de Estado de Transportes, que presentó la tercera fase de la terminal.
104.280 toneladas
Por el aeropuerto de Barcelona pasaron 104.280 toneladas el pasado año, lo que representó un incremento del 16,1 por ciento en comparación con 2009.
La tercera fase de la terminal de carga cuenta con 29.000 metros cuadrados de primera línea, para operadores de handling e integradores. Para compañías transitarias y operadores logísticos, hay 43.000 metros cuadrados en segunda línea y 32.000 metros cuadrados en tercera línea.
La nueva terminal de carga ha supuesto la construcción de un edificio de servicios generales y nuevas instalaciones de Iberia Cargo. Queda pendiente la construcción de un nuevo Punto de Inspección Fronterizo (PIF).
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