Competencia estima que esa medida junto a la implementación de la Estrategia Indicativa de las infraestructuras ferroviarias ofrecerían más certidumbre a las empresas del sector.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) valora positivamente los cambios contemplados en materia de cánones en el Anteproyecto de Ley que modifica la Ley 38/2015 del Sector Ferroviario (LSF).
Sin embargo, el organismo de Competencia advierte que quedan aún por concretarse aspectos clave para el desarrollo del mercado ferroviario como un convenio entre Adif y el Estado, así como la definitiva implementación de la Estrategia Indicativa de las infraestructuras ferroviarias, en la que está trabajando la nueva Dirección General de Planificación y Evaluación de la red ferroviaria del Ministerio de Transportes, como adelantó este periódico. Para la CNMC, “ambos mecanismos son esenciales para asegurar la estabilidad de los cánones en el medio y largo plazo”, afirma en un informe que acaba de hacer público.
Según este organismo, la implementación de estas dos medidas permitiría que el Adif incorporase a la ‘Declaración sobre la Red’ una senda previsible a cinco años de los cánones ferroviarios, lo que daría “certidumbre a las empresas ferroviarias sobre la evolución de esta importante partida de costes”. Sin embargo, “estas medidas todavía no han sido implementadas por lo que, si bien el mecanismo de fijación de los cánones ferroviarios mejorará con la aprobación del Anteproyecto de Ley objeto del presente informe, la incertidumbre sobre su evolución se mantendrá”, alerta el informe de la CNMC.
Como adelantó este periódico, con la modificación de la LSF, los cánones ferroviarios dejan de ser tasas y ya no tendrán que pasar por el filtro de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). A partir de ahora, estos cánones se convierten en prestaciones patrimoniales de carácter público no tributario. A partir de la aprobación de la modificación de la LSF, Adif propondrá sus tarifas con total independencia.
La firma de un convenio Adif-Estado es una reivindicación de todo el sector ferroviario, con la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas (AEFP) al frente, puesto que permitiría compensar la senda de evolución prevista en los cánones para los próximos 10 años, que asciende a la friolera del 1.700 por ciento.