Fiochi Estibadores, integrada en el grupo cántabro Cobasa, retoma las obras de la terminal de graneles agroalimentarios en el puerto de Santander, tras un parón de casi un año por problemas contractuales con la constructora Acciona, adjudicataria del proyecto. La terminal, cuya puesta en marcha estaba prevista inicialmente para finales del pasado año, podría estar operativa en verano, según confirmó el presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, Christian Manrique, Como ya adelantó este periódico, la nueva infraestructura se desarrolla sobre una parcela de 30.000 metros cuadrados en el muelle Raos 4 de la dársena y la inversión supera los 30 millones de euros.
La instalación tendrá una capacidad de almacenamiento horizontal superior a las 100.000 toneladas y el conjunto de los equipos de descarga y manipulación de mercancías garantizarán un rendimiento de descarga de 12.000 toneladas al día. El tráfico mínimo anual fijado en el primer año completo de operaciones en la terminal es de 400.000 toneladas, con incrementos del 1,5 por ciento sobre este volumen de tráfico en los años sucesivos hasta el final de la concesión, que tiene un plazo de 25 años.
No obstante, el presidente del organismo portuario avanzó que la instalación, cuando se encuentre plenamente operativa, podría canalizar hasta más de 2 millones de toneladas anuales, lo que supondría duplicar el tráfico actual de graneles agroalimentarios del puerto de Santander. De hecho, Manrique espera que la nueva terminal se convierta en un “motor atractivo” para la captación de nuevos tráficos. El presidente de la entidad subrayó, en este sentido, que la nueva instalación permitirá una “mayor eficiencia en costes”.
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