Las 25 novilladas arrancaron con un cartel en el que para que el tentadero disfrute aún hace falta respaldar a un primer espada que apueste por el intermodal en Valencia

Si hay algo que el shipping ha roto son los límites de la imaginación, aunque lo cierto es que si Maersk y MSC no se mueven el gigantismo de la industria se detendrá

Renfe tiene oportunidades para retornar como un Miura al multicliente a poco que se repiense qué hace en Abroñigal y por qué sus trenes no entran en Coslada

Entre puerto y Dragados-SPL echaron el capote a Renfe e idearon una fórmula para que recibiera 1.000 pesetas de la época por cada contenedor que entraba en la rada

Se sigue pensando que el contenedor cae del cielo y viene del mar.

No nos damos cuenta que poner en marcha un proyecto logístico lleva una enorme tramitación y miles de euros.

El anuncio de rebajar en los próximos años los ingresos por la tasa T-3 (mercancías) es un nuevo órdago a la vista para la dirección del puerto de Valencia

Noatum está en vías de evolucionar y será tanto el país de los barcos como el país de los trenes.

La única solución de futuro es un eje nuevo, un corredor de alta velocidad para pasajeros y liberar la vía convencional para las mercancías

Todo indica que con la llegada del gigante asiático Cosco, Noatum podrá cumplir su misión de ser el país de los barcos.

El affaire europeo del modelo laboral taponó la negociación local y mientras en Valencia se hablaba de conflictividad el debate en otras radas era las terminales automatizadas

El puerto de Valencia debería asumir el control de la terminal de Coslada y provocar su desarrollo.

Ha querido la historia que Anesco deba coser su futuro como patronal y ajustar su discurso cuarenta años después de su constitución, allá en 1977.

El consumo del futuro eliminará intermediarios.

El hombre no puede existir sin sueños y fantasmas.

Las alianzas entre operadores marítimos están llamadas a extenderse y aumentar su cooperación en tierra para aumentar la productividad

La dinámica es perder transbordo una vez que Maersk abra en Tánger-Med y Sines aumente sus espacios.

Hay que invertir en la línea 610, pero con proyectos logísticos serios basados en una inteligencia de mercado que en ocasiones no se vislumbran en el negocio

¿Va a empujar Valencia para llenar la ampliación de carga local que anime el transbordo de un gran naviero como Maersk? Hoy estamos en tierra de nadie

¿Logrará algún terminalista ser el operador global de referencia de Zara, El Corte Inglés o Carrefour? ¿Las terminales pueden hacer alianzas con los cargadores?