El modo marítimo, el frigorífico por carretera y los transitarios se convirtieron en el motor del crecimiento gracias al empuje de la exportación, que sigue tirando de la economía.
El sector aumentó sus ventas un 5,7% en España, contra todo pronóstico, en 2010, según los datos del avance de la encuesta anual de TRANSPORTE XXI, que recoge una muestra de 400 empresas. El modo marítimo, el frigorífico por carretera y los transitarios se convirtieron en el motor del crecimiento gracias al tirón de la exportación
Tras el ‘annus horribilis” de 2009, con una caída de las ventas superior al 14 por ciento, el transporte de mercancías retomó la senda del crecimiento en 2010 al elevar su cifra de negocio en España un 5,7 por ciento, contra todo pronóstico, aunque aún se encuentra casi tres puntos por debajo de la registrada en 2008, cuando estalló la crisis. Así se desprende de los datos del primer avance de la encuesta anual de TRANSPORTE XXI, que recoge una muestra de 400 empresas de todos los modos y actividades anexas, cuya facturación representa el 14 por ciento de los ingresos del sector (ver cuadro adjunto). El volumen de ventas acumulado por estas compañías, que ya han presentado sus cuentas anuales en el Registro Mercantil, asciende a cerca 3.627 millones de euros, frente a los 3.430 millones de 2009, que supuso regresar a los niveles del ejercicio 2006.
Hay que tener en cuenta que los datos sorprenden gratamente, incluso a los más optimistas, ya que la economía española retrocedió el pasado año, tras cerrar con una caída del PIB del 0,1 por ciento, aunque lejos de la registrada en 2009, que fue del 3,7 por ciento. Así las cosas, las claves del crecimiento del sector hay que buscarlas en el impacto de la escalada del gasóleo en el precio del transporte, que en el caso de la carretera podría rondar los tres puntos, y, sobre todo, en la notable mejoría del comercio exterior, que registró el pasado año un aumento del 5,1 por ciento en volumen de carga. En concreto, las exportaciones españolas tuvieron un espectacular crecimiento del 11,4 por ciento a lo largo del año 2010, hasta los 130 millones de toneladas, mientras las importaciones crecieron un 2 por ciento, con un movimiento de cerca de 241 millones de toneladas.
Una estadística que incidió directamente en la cifra de negocio de sectores como el marítimo, el transporte frigorífico por carretera y transitarios, íntimamente ligados al comercio exterior, que actuaron de motor del crecimiento del sector durante el pasado año, aunque todos los modos incrementaron sus ventas con respecto al año 2009. El mayor crecimiento se produjo en el negocio transitario tras el batacazo del ejercicio anterior, en el que sufrió de lleno el efecto rebote de la recesión y la contracción de la demanda interna. Las 37 transitarias recogidas en el avance de la encuesta anual de TRANSPORTE XXI sumaron una facturación de 264,8 millones, un 14,5 por ciento más que en 2009, que aún supone una caída del 8 por ciento con respecto a 2008.
El transporte marítimo, por su parte, creció un 9,5 por ciento, aunque las ventas todavía representan una caída del 18 por ciento frente al año 2008. Unas cifras que reflejan la tímida recuperación del tráfico portuario a lo largo de 2010, que cerró con un movimiento de 431,3 millones de toneladas y un crecimiento del 4,5 por ciento, tras registrar un año antes su mayor regresión negativa de la historia El transporte por carretera también creció un 4,7 por ciento su cifra de negocio en 2010, con unas ventas de 2.586,8 millones de euros. Dentro de este modo, destacó el crecimiento del transporte de contenedores, que aumentó sus ventas un 9,1 por ciento, fundamentalmente por la recuperación del tráfico en el sistema portuario español, y del frigorífico, punta de lanza del transporte internacional, que mejoró su facturación cerca de un 10 por ciento, favorecido por el buen comportamiento de las exportaciones de frutas y hortalizas hasta los mercados europeos.
PREVISIONES 2011
Las previsiones de cara al presente ejercicio, a falta del cierre de los últimos dos meses del año, son optimistas. Es cierto que la economía española, tal y como ocurrió en 2010, se estancó en el tercer trimestre, pero las exportaciones siguen tirando de España. Los ocho primeros meses del año dejaron un incremento de las mismas en volumen de carga del 5 por ciento, mientras las importaciones cayeron un 2,2 por ciento. El tráfico marítimo creció un 5,4 por ciento en el mismo período y la carga aérea aumentó un 4,2 por ciento hasta septiembre. No es de extrañar, por lo tanto, que se mantenga la tendencia alcista del transporte este año, tal y como avanzaron las empresas del sector consultadas por este periódico, cuyas principales conclusiones se recogen en las siguientes páginas.