A pesar de que los tiempos que corren no son los más favorables, Cosco ha culminado la renovación de la flota del servicio que enlaza el Mediterráneo con Extremo Oriente (la línea AMX) con el portacontenedor “Lu He”, que escaló por primera vez, el pasado 8 de mayo, en las instalaciones de la terminal de TCB del puerto de Barcelona. La naviera china inició a finales de 2007 la sustitución de los siete portacontenedores que cubren la línea AMX, que tiene una periodicidad semanal, lo que ha supuesto pasar de una capacidad de 3.500 TEUs a entre 5.000 y 5.500 TEUs por unidad. El pasado octubre fue cambiado el último portacontenedor con la incorporación del “Cosco Osaka”.
Ahora, se ha completado el refuerzo del servicio con un octavo buque, el “Lu He”, con una capacidad para 5.446 TEUs. Con la renovación y ampliación de la flota, Cosco incrementa en 17.500 TEUs la capacidad de este servicio, que también escala en el puerto español de Valencia, pasando de los 24.500 a los 42.000 TEUs. El refuerzo de esta línea contrasta con la retirada de oferta que en general están haciendo las grandes navieras en las rutas entre Asia y Europa, incluida la propia Cosco con el norte del continente.
La línea AMX era inicialmente realizada en joint service entre Cosco y CMA CGM, aportando un barco cada naviera. Desde hace un año, el armador chino cubre el servicio exclusivamente con barcos propios y alquila el espacio a otros tres armadores: K Line, Yang Ming y Zim. Además de la línea AMX, Cosco cuenta con otro servicio, en alianza con la israelí Zim, con escala en Barcelona que conecta el Mediterráneo con África occidental.
Un tercer servicio con Israel que hacia la china, también con Zim, con escala en Barcelona ha sido trasladado al vecino puerto de Tarragona, a las instalaciones de DP World Tarragona (antigua Contarsa), donde la filial logística de la naviera israelí, ZPL, es copropietaria (40 por ciento de las acciones) junto con el terminalista árabe DP World (60 por ciento).