La naviera china confía en atraer nuevos tráficos en los puertos, gracias al ‘efecto Pireo’ y las potencialidades de su filial de cabotaje intraeuropeo, Diamond Line.
Para poder seguir leyendo hay que estar suscrito a Transporte XXI, el periódico del transporte y la logística en España.
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies