Hacía tiempo que un fenómeno inesperado no tenía un impacto tan grande a escala global
El coronavirus ha cambiado la vida de gran parte de la humanidad. Ha detenido la actividad económica, ha hundido las bolsas y ha cambiado los hábitos de la sociedad contemporánea, relegando a las personas a trabajar desde sus casas, limitando reuniones y actividades sociales. Hacía tiempo que un fenómeno inesperado no tenía un impacto tan grande a escala global. Es una lección para la prepotente sociedad actual que, una vez más, comprueba como el hombre no puede ser señor de su propio destino.
En momentos como los que estamos sufriendo, la obligación de muchos es recluirnos en casa para evitar que la epidemia se extienda. Otros, sin embargo, deben permanecer al pie del cañón para prestar servicios esenciales. El trabajo de médicos y sanitarios es un ejemplo para la sociedad, que les ha homenajeado desde las azoteas de las calles. Además, hay que agradecer la labor a otros colectivos, sin tanto brillo, como la logística, la distribución y el transporte de mercancías. Gracias a ellos tenemos garantizado el suministro de productos esenciales. Gracias a ellos, personas que se encuentran en cuarentena pueden comer todos los días. Gracias a ellos, los medicamentos necesarios para tratar a los pacientes pueden llegar a tiempo a su destino.
El artículo 14 del RD 463/2020, que ha declarado el estado de alarma, regula las medidas en el ámbito del transporte. En su apartado 4 dice que el Ministerio de Transportes establecerá las condiciones necesarias para facilitar el transporte de mercancías en todo el territorio nacional, con el objeto de garantizar el abastecimiento de productos. Asimismo, en las medidas adoptadas recientemente sobre el cierre de fronteras, se garantiza que el tránsito de mercancías con las mínimas restricciones.
Esperamos y deseamos que, cuando salga publicado este artículo, la situación en España vaya volviendo a la normalidad, y los mercados empiecen a tener mejores augurios sobre el crecimiento futuro.
Mientras tanto, tal y como ha pasado con el personal sanitario, es momento de, hacer un homenaje a tantos profesionales de nuestro sector, que de manera oculta han contribuido a que todos podamos pasar estos difíciles momentos un poco mejor.