La línea capta un nuevo tráfico del operador intermodal Kombiverkehr, representado por Combiberia en España, con tracción de Renfe y que une Barcelona con Alemania.
La conexión en ancho de vía internacional (UIC) entre Barcelona y Francia a través del túnel de El Pertús ha captado un nuevo tráfico que no circulaba con anterioridad en ancho ibérico. Se trata de un servicio del operador intermodal alemán Kombiverkehr, cuyo socio en el mercado español es Combiberia, que conecta la estación de Morrot (en los accesos al puerto de Barcelona) con la de Ludwigshafen (Alemania).
Este enlace se pone en marcha con una frecuencia de tres días a la semana, por sentido, desde el 15 de octubre. La tracción es de Renfe como todas las líneas que salen del puerto de Barcelona o de la terminal de Morrot en ancho de vía internacional. El servicio de Kombiverkehr es el segundo tráfico nuevo atraído por la línea ferroviaria, que sortea la ruptura de carga en la terminal de Portbou para cambiar de ancho, desde que empezó a funcionar en diciembre de 2010. El primero ha sido el de Hupac, que enlaza la estación de Morrot con Amberes (Bélgica).
Este enlace empezó el pasado diciembre con una frecuencia de tres días a la semana, que se ha ampliado a cuatro. Además, circula por la conexión en ancho de vía internacional el conocido como Barcelyon, servicio entre el puerto de Barcelona y Lyon, promovido por la Autoridad Portuaria presidida por Sixte Cambra, Naviland Cargo y Renfe. El Barcelyon ya circulaba en ancho ibérico.
Saltó a la nueva conexión por El Pertús con dos frecuencias, que amplió a tres en verano de 2011. Una de las tres conexiones se desvía en Perpiñán hacia Toulouse-Burdeos. El otro servicio que circula por el tramo internacional es uno semanal de Renfe entre la estación de Morrot y la de Perpiñán. Hupac tenía otra conexión entre Barcelona y Milán que suprimió por cuestiones técnicas hace más de un año.
Este servicio se podría reemprender antes de que acabara 2012, aunque la decisión todavía no está tomada, puntualizaron fuentes consultadas por este periódico. Un total de 297 trenes circularon por el tramo internacional de peaje en ancho internacional entre Figueres y Perpiñán, en concesión a TP Ferro, en los primeros seis meses del año. Este movimiento supone el 52,30 por ciento más en comparación con el mismo periodo de 2011.
De cumplirse las previsiones que maneja TP Ferro, pasarán más de 500.000 toneladas de mercancías al cierre de 2012, cinco veces más que el tráfico registrado el pasado año, cuando se contabilizaron 96.000 toneladas. Aunque supone un incremento significativo, “seguimos lejos de las previsiones”, señala Santiago Martín, director general de TP Ferro. Con el nuevo servicio de Kombiverkehr, habrá 22 circulaciones semanalmente. El cálculo a priori eran 32 circulaciones diarias de trenes de carga en el segundo año de funcionamiento de la línea. “Tendríamos que estar en los cinco millones de toneladas al año”.
La necesaria involucración de los privados
Tiene que haber más puntos de carga, que la línea se prolongue hacia el sur, para que pasen más trenes de mercancías por la conexión en ancho de vía internacional. En otras palabras, se debe hacer el Corredor Mediterráneo ferroviario. Eso por lo que respecta a los deberes del Gobierno español. El francés también tiene que hacer los suyos, pero “no serán suficientes las actuaciones de ambos sin la implicación de los operadores ferroviarios”, señala el director general de TP Ferro. “Debe haber un cambio de chip para saltar del ancho ibérico al internacional”. Hasta la fecha, “se hametido únicamente Renfe y tiene que haber otros operadores involucrados”, añade el directivo. Otro problema es el monotráfico: la conexión ha atraído exclusivamente transporte intermodal y “difícilmente habrá de vehículosmientras no lleguen ramales en UIC a las fábricas”. Seat, que hizo un transporte piloto en UIC, lleva tiempo reclamándolo para su planta deMartorell.