El grupo inaugura en la terminal de contenedores del puerto de Bilbao sus seis nuevas grúas RTG híbridas ecoeficientes, en el marco de la renovación del 30% de su maquinaria de patio.
La terminal de contenedores del puerto de Bilbao, que gestiona CSP Iberian Bilbao Terminal, del grupo CSP Spain, lució ayer sus mejores galas para la puesta de largo de las seis nuevas grúas RTG híbridas ecoeficientes, adquiridas en el marco del ambicioso plan de renovación del 30 por ciento de su maquinaria de patio.
Como ya adelantó este periódico, los equipos, que llegaron desmontados a la dársena vasca en agosto procedentes del puerto polaco de Gdansk, están valorados en 12,6 millones de euros. La inversión forma parte del desembolso previsto de 45 millones en el quinquenio 2023-2027 en la dársena vasca.
El acto de inauguración, que logró reunir a una amplia representación de instituciones y empresas de la comunidad logística vinculada al puerto de Bilbao, contó con la participación de Ken Chan, CEO de CSP Spain, Elvira Gallego, Terminal Manager de CSP Iberian Bilbao Terminal, Ricardo Barkala, presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao, y Arantxa Tapia, consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco.
El CEO de CSP Spain, Ken Chan, puso el acento en la “eficiencia energética” y mostró el compromiso del grupo empresarial por el puerto de Bilbao como “centro estratégico en el Arco Atlántico”.
Por su parte, el presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao, Ricardo Barkala, recordó que la inversión de CSP Iberian Bilbao Terminal está “perfectamente alineada” con la estrategia de la entidad en su apuesta por la sostenibilidad, que “ayuda a incrementar la competitividad”. En su intervención, Barkala no pasó por alto el déficit en las infraestructuras del ferrocarril. “Es uno de los grandes retos que tenemos como puerto”, que hay que “abordar de forma urgente”, destacó.
En la misma línea, la consejera de Desarrollo Económico del Gobierno Vasco reclamó celeridad en las conexiones por tren con Europa. “El sistema ferroviario tiene que ayudar a que el puerto de Bilbao sea más competitivo”, subrayó Tapia.
Reducción de las emisiones
Los nuevos RTG, primeros de este tipo que operan en Europa, son puentes grúa sobre neumáticos, con estructuras de 135 toneladas de peso. Sus principales prestaciones son: 41 toneladas de capacidad de carga, 51 toneladas en carga excepcional, altura de elevación hasta 18,1 metros (5+1 contenedores), gálibo entre patas para seis contenedores y paso de camión. Al mismo tiempo, disponen de control Siemens integrado por Konecranes.
El objetivo de la renovación de la maquinaria de patio, que también está llevando a cabo en su terminal del puerto de Valencia, se centra en la “reducción de las emisiones totales de efecto invernadero”, que supondrá una mejora, “disminuyendo un 40 por ciento el consumo de combustibles fósiles”, destacan desde la compañía. En cuanto a la productividad, “se mejorarán las operaciones de recepción tanto en el área ferroviaria como en la explanada destinada a operativa terrestre”, añadieron los mismos interlocutores.
El grupo CSP Spain, participado por la china Cosco Shipping Ports (51 por ciento) y la francesa CMA CGM (49 por ciento), cuenta con dos terminales marítimas en Bilbao y Valencia, dos terminales ferroviarias en Zaragoza y Madrid, un operador ferroviario y una empresa de ferrocarril, CSP Logitren. Las ventas del grupo en España superaron los 306 millones de euros en 2021, con un crecimiento próximo al 14 por ciento.
CSP Spain, presente en España desde hace cincuenta años, pertenece al grupo CSPL, que cuenta con más de 46 terminales de contenedores en todo el mundo y suma un movimiento global superior a los 90 millones de TEUs.