La alemana podría traspasar a la francesa la construcción de su gama Sprinter de furgones huyendo de VW, que ya controla MAN.
La alemana Daimler podría estar considerando dejar de encargar a Volkswagen la construcción de la carrocería de su gama Sprinter, que comparte bastantes elementos de chapa con los furgones Crafter que los deWolsburg construyen para ellos, para encomendar aquélla a su socio francés Renault, que ya le está haciendo la pequeña Citan
La alemana Daimler y la francesa Renault han reconocido mantener conversaciones sobre la ampliación de sus actuales acuerdos de colaboración en el ámbito de las furgonetas a un modelo mayor de los ahora contemplados. Hay que recordar que Renault está acuciada por la necesidad de aumentar la producción en sus instalaciones francesas, para cumplir con los acuerdos alcanzados con los sindicatos, por los que los trabajadores franceses se han comprometido a congelar sus salariose este año y a aumentar su productividad.
Por ese motivo, Nissan va a transferir al año que viene la producción de su gama Primastar que se hacía en Barcelona, junto con la de algunos miles de unidades que también se construían allí de su clónico, el Renault Trafic, a la fábrica que esta última tiene en Sandouville (Francia). Además, los acuerdos con los sindicatos incluyen una reducción del 17 por ciento en la plantilla de Renault.
Otro aumento de la producción en las fábricas de Renault podría venir de la mano de un acuerdo por el que los franceses construirían para Daimler la gama Sprinter de furgonetas Mercedes-Benz, de la que está a punto de lanzarse al mercado una nueva revisión, equipada ya con motores Euro 6. En la actualidad, Daimler mantiene un acuerdo con Volkswagen para la construcción de las Sprinter, que comparten carrocería con la gama de furgones Crafter de VW, que concluye en 2016. La absoluta implicación que en los últimos tiempos ha mostrado VW en MAN, competidor directo de Daimler Trucks, ha convertido a la primera en un compañero incómodo de viaje para esta última.
Por eso, Daimler está considerando la posibilidad de reemplazar a los de Wolfsburg por los de París, aunque éstos le hayan dado últimamente un susto al ser calificada la gama Citan de Mercedes, que deriva del Kangoo de Renault con sólo tres estrellas NCAP, una organización que valora la resistencia de los vehículos al choque. Además, hace ya meses que en la industria circulan rumores de que Volkswagen ha comenzado a desarrollar su propio producto para reemplazar al actual Crafter.
Hay que suponer que, al igual que ha ocurrido con el Kangoo y el Citan, lo que Renault intentaría es que una futura generación de las Sprinter alemanas fabricadas por los franceses tuviera muchos elementos en común con las gamas Trafic y Master de estos últimos.
Sólo la mera posibilidad de una ampliación de los acuerdos entre Renault y Daimler en el ámbito de las furgonetas ha hecho reaccionar al rival más directo de la primera de ambas compañías, PSA, que ha reconocido estudiar con la estadounidense GM, con la que mantiene acuerdos industriales y que también tiene un 7 por ciento de participación en el capital de PSA, la posibilidad de fabricar conjuntamente una gama de furgonetas que se comercializaría fuera de Europa.