Andreas Renschler, responsable máximo de Daimler Trucks y presidente de la división de vehículos industriales de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), declaró recientemente a la revista alemana Automobilwoche que para fomentar el crecimiento económico hay que realizar inversiones masivas en infraestructura, único medio de evitar la cada vez mayor congestión de tráfico generada por el aumento del volumen de mercancías transportadas.
Renschler aclaró que esas inversiones no debían circunscribirse a las carreteras sino extenderse también al tráfico fluvial y al ferroviario, así como a mejorar la conexión entre los diferentes modos de transporte. Al mismo tiempo, Renschler defendió el camión como medio de transporte y dijo que, en contra de las cifras que se manejan habitualmente, es un medio mucho menos contaminante de lo que se dice. Por ejemplo, Renschler aseguró que su compañía había demostrado recientemente que un conjunto articulado de 40 toneladas a plena carga generaba unas emisiones de 35 gramos por tonelada transportada y kilómetro recorrido, una cifra menor que la que generan el transporte fluvial y ferroviario.
Por último, el responsable máximo de Daimler Trucks y presidente de la división de vehículos industriales de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) dijo que si el transporte por camión sale más caro, hay que tener en cuenta que a cambio es un transporte mucho más flexible y rápido al reducir notablemente los puntos de intercambio y que en la Comisión Europea deben sopesar la repercusión que ciertas normas para limitar emisiones de CO2 pueden tener sobre el crecimiento económico. “Lo que los políticos tienen que valorar es si quieren movilidad o quieren volver a la Edad de Piedra”, dijo Renschler.