La alemana Daimler y la china Beiqi Foton han firmado por fin su largamente madurado acuerdo para establecer una sociedad conjunta a partes iguales con el objetivo de construir camiones de tonelajes medio y pesado y de estudiar las posibilidades de exportar los camiones Auman del socio chino a otros mercados. Con la marca Auman se fabrican en China tractoras, volquetes, chasis-cabina y vehículos especiales.
Tras varios años de negociación, interrumpidos en 2007 cuando Beiqi Foton dio marcha atrás en sus intenciones de vender a Daimler un 24 por ciento de su capital, al no conseguir la aprobación del gobierno chino, las dos partes habían anunciado que llegarían por fin a un acuerdo tras la celebración de los Juegos Olímpicos de Pekín, como así ha sido. La nueva sociedad tiene que recibir ahora el beneplácito de las autoridades chinas, por lo que los alemanes tendrán que recorrer aún un largo camino hasta conseguir su propósito, pero así son las cosas en el gigante asiático. Si finalmente es aprobado el proyecto, se cree que representará un desembolso conjunto de 290 millones de dólares.
Daimler tiene otra sociedad en el campo de los vehículos comerciales con Fujian Motor y China Motors que se denomina Fujian Daimler Automotive y que deberá empezar a producir furgonetas en China en el año próximo. Por otro lado, la alemana Daimler ha anunciado su intención de invertir 1.500 millones de reales brasileños (unos 622 millones de euros) para aumentar la capacidad de producción de camiones, autobuses y componentes para ellos en sus instalaciones brasileñas de San Bernardo del Campo. Parte de ese dinero se destinará a mejorar los procesos de fabricación y la logística y a elevar el porcentaje de contenido local de los vehículos allí fabricados.
Debido al fuerte incremento experimentado por la demanda brasileña de vehículos industriales durante el presente año, las instalaciones de San Bernardo del Campo están funcionando en estos momentos casi al límite de su capacidad de producción y como Mercedes-Benz de Brasil quiere aumentar el ritmo diario de fabricación en un 25 por ciento, se hacen imprescindibles las inversiones mencionadas con las cuales se pretende además asegurar la competitividad de la planta brasileña para los diez años próximos y mejorar la flexibilidad de producción de manera que el mix de producto pueda modificarse con mucha más rapidez que ahora, según declaró Gero Hermann, responsable de Mercedes-Benz de Brasil.