El nuevo producto de transporte ferroviario del ferrocarril alemán conecta Oslo con la ciudad de Narvik, en el círculo polar ártico de Noruega. Se trata de un recorrido de 1.960 kilómetros que transporta bienes de consumo, carga consolidada y coches nuevos cinco días a la semana.
En el viaje de retorno los trenes transportan pescado y productos agrícolas. La empresa alemana prevé un volumen de 25.000 contenedores al año. El tránsito es de 28 horas, lo que supera en mucho el tiempo empleado por los camiones en la misma ruta. La capacidad del servicio es de 12.500 camiones anuales.