El gigante logístico alemán negocia con UPS una salida para sus actividades de transporte de paquetería en Estados Unidos.
Deutsche Post acaba de publicar sus resultados finales del año 2008, y señala que el beneficio antes de impuestos acusa un descenso del 9,7 por ciento con respecto a 2007. La empresa, que sigue negociando con UPS qué hacer con todos los activos y servicios en EE.UU., se niega a lanzar una previsión para 2009
Deutsche Post World Net cierra el ejercicio 2008 con un balance general negativo. Además del sufrimiento que supuso ver cómo el líder Klaus Zumwinkle salía esposado de su casa, acusado de evasión de impuestos, el gigante amarillo se enfrentó a la quiebra del transporte urgente en EE.UU. y a la dimisión de algunos de sus directivos más influyentes. Así, la empresa registra un descenso del EBIT subyacente del 9,7 por ciento, mientras que la cifra de facturación se mantiene estable (54.500 millones de euros, un 0,8 por ciento menos que en 2007).
Este último dato indica que DPWN se ha convertido en un gigantesco conglomerado de empresas, muy difícil de gestionar eficientemente. Sólo en el último trimestre de 2008 el EBIT se desplomó un 26,7 por ciento. En la cima de la montaña yace el gigantesco coste de la reestructuración de la paquetería en EE.UU., y que ha llevado a la compañía a anotarse una pérdida neta total de 1.690 millones de euros. Todas las unidades de negocio de DPWN se suscriben a las malas noticias. La paquetería redujo su EBIT en un 50 por ciento, mientras su facturación retrocedía un 2,8 por ciento.
La logística tampoco se salva, con numerosas cancelaciones de contratos y reestructuraciones con un coste total de 1.000 millones de euros. Si obviamos esta cifra, la unidad consigue un aumento del 5,7 por ciento en el EBIT de 2008, con un descenso de la facturación del 5,5 por ciento. Con tantas cancelaciones y pagos extraordinarios resulta complicado determinar cuál es el estado de salud de DPWN. La empresa, que sigue negociando con UPS qué van a hacer con todos los activos y servicios en EE.UU., se niega a lanzar una previsión para el presente ejercicio.