La transitaria prevé pasar de 10 remolques semanalmente subidos al servicio de VIIA entre Le Boulou y Luxemburgo a 10 diarios y el siguiente objetivo será utilizar VIIA Britanica de cara a 2025.
La apuesta intermodal de DSV Road Spain dará un salto importante este otoño. El objetivo de la transitaria dedicada al transporte por carretera del Grupo DSV es pasar de mover una media de 10 remolques semanalmente, por sentido, a 10 diarios en la autopista ferroviaria de VIIA entre Le Boulou, junto a la frontera española, y Bettembourg (Luxemburgo) a partir de septiembre.
La compañía sube a la autopista ferroviaria “tráficos de clientes que ya teníamos y que nos han dado más volúmenes al incorporar el tren”, señala Julián Pascual, director general de DSV Road Spain. Son clientes sobre todo del sector de la automoción, el principal para el que trabaja, y, en menor medida, del retail. Y son clientes dispuestos a “asumir una mayor flexibilidad de la cadena de suministro”.
Los flujos proceden mayoritariamente del arco mediterráneo, de la Comunidad Valenciana y de Cataluña, que consolida, si es el caso, en su hub de Molins de Rei (Barcelona). El operador utiliza sobre todo vehículos alimentados por gasóleo de origen vegetal (HVO), tanto para llegar a Le Boulou como para la última milla en un radio de 200 kilómetros desde Bettembourg para alcanzar Centroeuropa. En cuanto a los tráficos de retorno, “nos apoyamos en la fortaleza de la red” de la multinacional danesa, que cuenta “con casa propia en todos los países europeos”.
Comercializar el tren “nos está abriendo las puertas a potenciales nuevos clientes que esperamos concretar en breve”. Ello contribuirá a que “lleguemos a los 10 remolques diarios de ida y vuelta durante el tercer trimestre del año”, añade el directivo. El siguiente objetivo será subir los vehículos a VIIA Britanica, la autopista de la filial de SNCF entre Le Boulou y Calais para llegar al mercado británico, eso sí, ya de cara a 2025.
Además de fomentar el transporte ferroviario y de utilizar combustible HVO, la filial española tiene el foco puesto en los vehículos eléctricos para reducir la huella ambiental. DSV Road incorporará las primeras, entre 8 y 10 unidades eléctricas, entre lo que queda de año y 2025. Son vehículos que “utilizaremos para la última milla al tener una autonomía máxima de 300 kilómetros”.
La transitaria gestiona una flota de 640 semirremolques tras culminar la incorporación de las últimas 160 unidades. Ello supone que “casi hemos triplicado flota en tres años”. Un incremento que responde, principalmente, al crecimiento de la operativa que ha registrado para el sector de la automoción. Y es que más de la mitad de la flota (380 unidades) son semirremolques de tres metros de altura, utilizados sobre todo para este sector. “Seguiremos creciendo en flota, aunque no con una curva ascendente tan elevada”.
DSV Road, quinta transitaria con sede en Cataluña y novena del ranking español, registró unas ventas de 210,64 millones de euros y un crecimiento del 33 por ciento en 2022, según el último Libro Blanco del sector de Transporte XXI. La compañía, cuya principal actividad es el transporte internacional en la modalidad de grupaje, crece en operaciones nacionales a un ritmo de entre el 10 y el 12 por ciento anual en los últimos tres años. “Nos hemos convertido en un competidor fuerte en el mercado doméstico”. Este tipo de flujo “nos permite tener más agilidad en el territorio nacional y da una cobertura global a los clientes internacionales”.
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