Las nuevas instalaciones de Al Maktoum podrán mover más de doce millones de toneladas de carga anuales a partir de 2035.
El gobierno dubaití ha inaugurado recientemente la primera fase del aeropuerto de Al Maktoum. Con seis pistas, un centro de carga descomunal que manipulará 12 millones de toneladas, y una inversión estimada en 10.000 millones de dólares, el recinto dubaití aspira a ser el mayor aeropuerto de carga del mundo en 2035
El aeropuerto destinado a ser el mayor del mundo en carga aérea ha abierto sus puertas en Dubai. A pesar del colapso de Dubai World, la principal empresa de inversión pública del país petrolero, el reino árabe parece dispuesto a dejar atrás su modelo económico anterior, basado en el comercio y la construcción, para crear una vasta infraestructura logística que lo conviertan en el hub de Oriente Medio, y el aeropuerto Al Maktoum es parte importante de dicho objetivo. El recinto aeroportuario cuenta con una pista de aterrizaje apta para recibir el Airbus A-380, y una terminal de carga con capacidad para mover 250.000 toneladas al año.
La terminal de pasajeros también está a punto de abrir sus puertas (cinco millones de personas pasarán por ella cada año), si bien el negocio de Al Maktoum se concentrará en la carga en su primera fase de desarrollo. A largo plazo, el proyecto de Al Maktoum es mover 12 millones de toneladas al año, y hasta 150 millones de pasajeros. El recinto contará entonces con seis pistas de aterrizaje, y un centro de carga que será diez veces más extenso que el actual aeropuerto internacional y el Dubai Cargo Village juntos. El coste del proyecto está estimado en 10.000 millones de dólares, y se completará a lo largo de los próximos 15 años.
El aeropuerto de Al Maktoum es otro ejemplo de la explosión económica de Dubai, un auge que se derrumbó con el anuncio de que Dubai World era incapaz de asumir su deuda de 23.000 millones de dólares. Y sin embargo, el monarca de Dubai, Sheikh Mohammed bin Rashid al-Maktoum, ha anunciado recientemente que pretende seguir adelante y finalizar todos los proyectos de infraestructuras del emirato, incluso si algunos han de ser aplazados.
Por ahora los resultados del tráfico de contenedores del puerto y de la carga aérea se mantienen al alza gracias al crecimiento de los tráficos en Oriente Medio y en el Sureste asiático, y la necesidad de construir un nuevo aeropuerto es resultado de las ambiciones de la aerolínea nacional Emirates, que ha invertido una suma astronómica en aviones (entre ellos el mayor pedido de A-380) y quiere aumentar sus tráficos de carga. Sin embargo, los expertos se cuestionan sobre si la demanda podrá absorber tan rápidamente la tremenda capacidad proyectada en Al Maktoum, y si el país podrá afrontar la financiación del proyecto y de las infraestructuras elécticas e hidráulicas que van con él.