Los ingresos alcanzaron los 11.500 millones, con un descendo del 12,9% por la crisis.
Empujados por la crisis y por los costes derivados de la reestructuración de DHL Express en Estados Unidos, los resultados de Deutsche Post y DHL en el primer trimestre del año se derrumban. La dirección de la empresa insiste en su plan de reducir ineficiencias mientras otras voces comienzan a reclamar la escisión del grupo
Deutsche Post DHL ha publicado recientemente sus resultados trimestrales, revelando una caída del 12,9 por ciento en sus ingresos (11.500 millones de euros), y de un 42,1 por ciento en el beneficio bruto (312 millones de euros). La dirección señala que el retroceso se debe a un derrumbe sin precedentes de la demanda en todas las regiones y todos los sectores, así como a una reducción de los volúmenes transportados y un aumento de los costes en la sección de correo tradicional.
El EBIT de esta división cayó a 27 millones de euros frente a los 539 millones del año pasado (principalmente debido a los costes de la reestructuración de DHL y al cierre de operaciones en Estados Unidos, que pesaron en el EBIT con una pérdida de 392 millones de euros). El ingreso global de DHL Express disminuyó un 25,9 por ciento en el primer trimestre (2.500 millones de euros). En Europa, la cifra de negocios retrocedió un 16,9 por ciento a causa del descenso de los volúmenes, mientras que en la región Asia Pacífico el ingreso reculó un 6,7 por ciento (allí la posición de la empresa encontró un respiro en la fluctuación de los tipos de cambio, al igual que en Europa del Este y en el continente africano).
La dirección de la empresa señala que está planificando una reorganización profunda de la actividad para “flexibilizar y optimizar el negocio” a través de la eliminación de “grasa” en la organización y la concentración en los negocios internacionales más rentables. La unidad de negocio de transitario también sufrió un descenso en los volúmenes de actividad. El ingreso cayó un 18,2 por ciento (2.660 millones de euros). La carga aérea retrocedió un 26,2 por ciento debido a la debilidad del sector de las altas tecnologías. El marítimo redujo su marcha un 10 por ciento, y la carretera cayó un 15,5 por ciento.
El EBIT de la división pasó de 78 millones de euros en el primer trimestre de 2008 a 45 millones en 2009. Entre la bruma sobresale la división de la cadena de suministro, que “sólo” pierde un 6 por ciento de los ingresos, sobre todo debido al impacto negativo del tipo de cambio (sin contar este efecto, el retroceso es del 2,4 por ciento). De hecho, en términos de nuevos contratos la empresa mejoró los registros del año pasado; el EBIT se mantuvo firme en 34 millones de euros, y si se excluyen los costes de la reestructuración (8 millones de euros), incluso crece un 23,5 por ciento.
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