El operador logístico árabe Agility (Kuwait) obtuvo un beneficio neto de 201,3 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un declive del 8 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado.
Y es que la empresa sigue reestructurando su negocio después del final de la presencia militar estadounidense en el Golfo Pérsico, y el cierre de sus contratos logísticos. Los ingresos aumentaron un 1 por ciento hasta los 7.893 millones en su segmento de negocio principal, Global Integrated Logistics, que sigue siendo el principal motor de desarrollo del grupo en los países emergentes de Oriente Medio, Asia, Europa del Este y, cada vez más, Latinoamérica y Africa.
La unidad de negocio de infraestructuras contribuyó con 1.349 millones a la facturación del grupo, y la división inmobiliaria se convirtió en un factor clave del corporativo, con un crecimiento del 14 por ciento con respecto al primer trimestre de 2011. Tarek Sultan, presidente y director general de Agility, señala que “hemos trabajado mucho en reestructurar el negocio en los dos últimos años, y hoy podemos decir que seguimos siendo una compañía fuerte y estable, más eficiente, optimizada y competitiva. A pesar de que aún tenemos trabajo por delante para completar estoy convencido de que vamos por el buen camino”.