La instalación tendrá 101.178 m2 de espacio y saldrá a concurso por un plazo de 25 años.
El empresariado tinerfeño respalda el proyecto de la Autoridad Portuaria de Tenerife de abrir una segunda terminal de contenedores en la dársena canaria en libre competencia con la actual instalación que gestiona la estibadora Capsa. La nueva instalación tendrá 101.178 metros cuadrados y saldrá a concurso por un periodo de 25 años
El empresariado tinerfeño respalda la apuesta de la Autoridad Portuaria de Tenerife, que preside Pedro Rodríguez Zaragoza, de dotar al puerto canario de una segunda terminal de contenedores en la nueva superficie abierta en el Dique del Este. Tanto CEOE-Tenerife como la Cámara de Comercio de la provincia canaria creen que la puesta en marcha de la nueva terminal de contenedores es vital para reactivar el tráfico portuario y demandan que se agilice la inversión.
Para el secretario general de CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, la ampliación de la citada terminal es “indispensable para aumentar la capacidad productiva y la oferta para la mejora de servicios portuarios, así como lograr un puerto más eficiente y con un desarrollo más sostenible a largo plazo”, mientras que para el presidente de la Comisión de Transportes de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Vicente Victoriano Martín, “la terminal de contenedores del Dique del Este es una herramienta estratégica que, complementada con la finalización del puerto de Granadilla y la futura ampliación del aeropuerto Tenerife Sur-Reina Sofía, crearán para la Isla y para la región un nicho importante de negocio que, de alguna manera, vendrá a ponernos en primera línea de los puertos más importantes de Europa”.
El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Tenerife aprobó el pasado mes de diciembre los pliegos para la concesión de la nueva terminal de contenedores, cuyo objetivo es “favorecer los tráficos import-export e iniciar al recinto portuario en el tráfico de transbordo, pero, sobre todo, lograr la libre competencia en tráfico contenerizado”. La nueva instalación tendrá una superficie de 101.178 metros cuadrados de espacio operativo con una línea de atraque de 735 metros, lo que permitirá el atraque de dos buques de forma simultánea.
La terminal se concesionará por un periodo de 25 años, estableciéndose una opción de prórroga de otros cinco años. El objetivo de la Autoridad Portuaria es que la terminal suponga la llegada de un nuevo operador al Dique del Este, impulsando la libre competencia en el tráfico de contenedores, hasta ahora atendido exclusivamente por Capsa, filial de Grup TCB. En este sentido, hay que recordar, como anticipó TRANSPORTE XXI, que Capsa puede presentarse al concurso, pero para ello tendrá que renunciar a su actual terminal, ya que el pliego elaborado por el puerto impide que la misma empresa opere las dos terminales de contenedores del recinto portuario. Con la entrada en servicio de la nueva terminal, Tenerife dispondrá de 265.000 metros cuadrados dedicados al tráfico de contenedores.