La nueva sociedad instalará 85 electrolineras en 2011 que sumarán 13.000 en el año 2020.
El vehículo eléctrico está cada vez más cerca y ya se ha dado el pistoletazo de salida para la carrera por posicionarse en este nuevo negocio. Así, el Ente Vasco de la Energía y Repsol se han colocado en cabeza y han creado la sociedad denominada Ibil, gestor de carga de vehículo eléctrico, participada al 50 por ciento por cada entidad. La nueva sociedad operará como gestor de carga del sistema eléctrico y su misión consistirá en desarrollar la red de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos y comercialización de servicios de recarga.
El plan de negocio de Ibil se enmarca en una estrategia de fomento del coche eléctrico que prevé un crecimiento lento del numero de vehículos en circulación con el objetivo a 2020 de que el 10 por ciento de los coches que se matriculen en dicho año sean eléctricos. Para ese año, se estima que 41.000 coches eléctricos puros o híbridos circularán por las carreteras del País Vasco.
La nueva empresa, a la que inicialmente se dotará con un capital de dos millones de euros, comenzará su actividad en 2010 mientras que el despliegue de red empezará el próximo ejercicio cuando los responsables de la sociedad prevén instalar 85 puntos de recarga o electrolineras, que irán incrementando hasta alcanzar entre 7.000 y 13.000 puntos instalados en el año 2020.
A medio plazo, la inversión necesaria se estima en 11 millones de euros. Según el plan previsto, los primeros puntos de suministro podrán verse en la vía pública y en parkings de las tres capitales vascas, centros comerciales, estaciones de transporte y en estaciones de servicio de las vías de carretera principales. Con esta iniciativa, Ibil persigue el doble objetivo de garantizar la movilidad en vehículo eléctrico e introducir los sectores de energía y electrónica en el nuevo mercado.
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