La SNCF ya lo intentó hace un año y medio, pero entonces se cruzaron en su camino la FNTR (Federación Nacional del Transporte por Carretera), que controla un 16 por ciento de las acciones, y de las autoridades de defensa de la competencia, que temían que con la operación el ferrocarril galo dominara el transporte combinado en Francia. Pero la posición financiera actual de Novatrans vuelve a abrir la puerta para que la SNCF obtenga una porción mayoritaria del operador de transporte combinado (actualmente controla el 38 por ciento de las acciones), según publica el diario económico ‘Les Échos’.
Novatrans habría perdido cerca de seis millones de euros el año pasado, por lo que se plantea una ampliación de capital para financiar el desarrollo de la empresa, por valor de seis a siete millones de euros. La SNCF estaría dispuesta a realizar un esfuerzo económico, pero sólo a cambio de aumentar su participación en el capital. El panorama además es mejor que el del año pasado, ya que la postura de la FNTR se ha suavizado.
La asociación ha declarado que “el transporte combinado debe ganar, por lo que las partes están condenadas a entenderse”. Sin embargo, la FNTR quiere conservar una minoría que le permita bloquear la entrada de accionistas del sector. Pero además, los transportistas no quieren que la SNCF les robe clientes al ofrecerles una oferta combinada de Novatrans con su filial de transporte por carretera Geodis.
Por otro lado, la FNTR ha reclamado recientemente al Gobierno francés que haga valer la cláusula de salvaguarda prevista en el actual reglamento de cabotaje, y que prevé que en caso de perturbación grave del mercado nacional del transporte, debida al cabotaje o agravada por el mismo, todo Estado miembro puede acudir a la CE para que aplique medidas de salvaguarda.
Para ello, el Estado miembro debe comunicar las medidas que piensa implantar cara a los transportistas nacionales, que tienen un plazo de aplicación y son renovables una vez. Estas medidas pueden llegar incluso a la prohibición del cabotaje, aunque en este caso los transportistas nacionales tampoco pueden realizar cabotaje en los otros Estados miembros. El Gobierno francés aún no ha solicitado la aplicación de la cláusula, a pesar de que la FNTR lo solicitó el pasado mes de enero y que el 90 por ciento de los transportistas franceses apoyarían la medida, según sus propias estadísticas.
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